El juicio que se lleva a cabo contra un joven empresario en la República Dominicana, habría dado al traste para que organismo de seguridad de los Estados Unidos y Europa investiguen un supuesto tráfico de armas que se está produciendo por la frontera con Haití.
Las investigaciones giran en torno a si estas armas estarían llegando a Colombia o a países árabes, donde se utilizarían para ayudar al narcotráfico. Los organismos buscan evitar que la frontera domínico-haitiana se convierta como la méxico-americana, por donde pasan cerca de 2,500 armas ilegales diariamente.
Mientras esto está sucediendo en el país, los organismos del Estado nacionales no tienen ninguna investigación abierta y, todavía, no se han pronunciado al respecto.
Las indagaciones iniciaron, supuestamente, cuando al empresario norteamericano, de origen árabe y residente en el país, Carim Abunaba’a, se le abrió un caso por agresión y salió a relucir que éste ha comprado "un sinnúmero" de armas de fuego de alto calibre en Estados Unidos y la ha introducido a Dominicana de manera privilegiada.
Siguiendo dos declaraciones juradas, de personas cercanas a Abunaba’a, los investigadores habrían descubierto que éste adquirió en la ciudad de Miami tres pistolas marca Garstar Bergion Calibre 5.7×28 milímetros; una metralleta calibre 50 y una ametralladora marca Garstar modelo P90, calibre 5.7×28 milímetros.
DominicanosHoy.com supo que los organismos estarían ligando un cargamento incautado de seis pistolas, un revólver y una metralleta, a las armas compradas por Carim Abunaba’a. En este decomiso, también se incautaron drogas.
Andreas Wilhelm M. Bothe, un alemán ex empleado de Carim, declaró que fue testigo de la compra de "innumerables" armas de fuego de alto calibre; entre las cuales pudo destacar 3 pistolas marca Gerstar; una metralleta calibre 50 y una ametralladora modelo P90calibre 5.7 x 28 milímetros.
El asistente de Carim sostuvo que durante su empleo, Carim utilizó su tarjeta de crédito número 4505-6635-2109-1600, con el fin de comprar unas 2,000 municiones para las armas de fuego que había adquirido en una empresa de Miami, Estados Unidos, donde, se dice, inicio el seguimiento contra Abunaba’a.
Bothe sostuvo en sus declaraciones que Carim pagó 10,000 dólares por una metralleta y sus accesorios y que esto llegó al país en un avión privado e introducido por el Salón de Embajadores del Aeropuerto Internacional de Las Américas, José Francisco Peña Gómez.
Sin duda alguna, cuenta una fuente conocedora del tema, que Abunaba’a tuvo que utilizar alta influencia militar para ser privilegiado con el embarque de esas armas y, “conociendo la manera de cómo fueron introducidas al país, de seguro que fue así”.
La fuente criticó a las autoridades por permitir al empresario de origen árabe, Carim Abunaba’a, la tenencia y uso de armas de guerra en la República Dominicana, por entender es un mal ejemplo e incentiva al tráfico de armas.
Los cuerpos investigativos indagaban, además, el hallazgo de varios cargamentos de municiones detectados en cajas y tanques de alimentos consignados a personas y familias en Santo Domingo, Haina, Santiago, La Vega y Puerto Plata.
Desde hace tres años hay una prohibición de importación de municiones puesta en vigencia por la Secretaría de Interior y Policía a los fines de contener el uso de armas de fuego en el país y disminuir la mortalidad por esta vía.
Algo que no se explica, es como una persona puede tener tanto privilegios sin ser diplomático, ya que el Salón de Embajadores es manejado por la Cancillería de la República.
Antecedentes
Se recuerda que el ex general Salvador Augusto Lluberes Montás, implicado en el caso de la muerte del periodista Orlando Martínez, fue apresado por más de tres años por porte de arma ilegal, sin importar que este haya sido jefe de la Policía Nacional, de la Fuerza Aérea Dominicana y un militar muy ligado al presidente Joaquín Balaguer.
Aunque en su condición de militar tiene el derecho de portar armas de fuego, Lluberes Montás fue castigado por el hecho.
En el caso que nos atañe, donde el empresario Abunaba’a tiene vínculos cercanos con el gobierno, especialmente con los cuerpos militares, se espera que suceda algo similar, según la fuente.
Recientemente, el chofer del bachatero Anthony Santos y otro hombre fueron detenidos con dos pistolas y seis mil cápsulas ilegales, e inmediatamente, fueron traducidos ante la justicia.
Los detenidos son Randy Valdez Estévez, chofer del artista, y César Alvarez Peña, quienes tenían las armas en una yipeta propiedad de Ruddy Antonio Santos Muñoz, hermano del bachatero. El apresamiento se realizó durante un operativo en un centro comercial de Santiago.
Abunaba’a es un empresario que mantiene un monopolio en el negocio del asfalto goza de grandes privilegios,
DominicanosHoy.com ha sabido que las armas están en manos de militares, ya que se le había avisado al empresario que iba a ser allanado, o sea, que los mismos que deben perseguir el contrabando de armas, son los que colaboran para que este negocio.
Desconocimiento de organismos
Estas graves denuncias son desconocidas por los organismos de seguridad del Estado como la Dirección General de Migración, las Fuerzas Armadas, el Ejército Nacional, el Cuerpo Especializados de Seguridad Fronteriza (CESFRONT) y la Secretaría de Interior y Policía.
Sin embargo, la pasada semana, el presidente de la DNCD, Gilberto Delgado Valdez, el jefe de la Policía, Rafael Guillermo Guzmán Fermín y el secretario de las Fuerzas Armadas, Rafael Peña Antonio, realizaron una inspección en la frontera dominico-haitiana, donde dieron instrucciones de no dejar pasar ningún cargamento ilícito.
El secretario de Interior y Policía, Franklin Almeyda Rancier, dijo que no tiene informes sobre supuestas investigaciones que autoridades norteamericanos hacen en República Dominicana, relacionadas con el tráfico de armas a través de la Frontera por Haití y el Aeropuerto Las Américas.
Documentos
DominicanosHoy.com tiene en su poder un fardo de documentos confidenciales que dan cuenta que la justicia dominicana tiene en su poder los expedientes de las investigaciones que realizarían los organismos internacionales.
Estos expedientes contienen interrogatorios de amigos, colaboradores y personas cercanas al gobierno, donde dan su testimonio sobre la compra de armas de fuego por parte del empresario Carim Abunaba’a.
Los documentos están depositados en el Primer Juzgado de Instrucciones del Distrito Nacional, desde el pasado 24 de marzo del presente año.
