París.- La Fiscalía pidió hoy diez años de prisión para Véronique Courjault, la mujer francesa acusada de matar a tres de sus hijos al poco de nacer y congelar los cadáveres de dos de ellos en el frigorífico del domicilio familiar.
En la jornada de hoy del proceso que se sigue contra ella en el Tribunal de lo Criminal de Tours (centro), el fiscal Philippe Varin pidió esa pena argumentando que no hay que "diabolizar" a la acusada pero tampoco convertirla en un "icono".
Los abogados de Courjault, de 41 años, -que reconoció haber matado a los tres bebés-, sostienen que la mujer sufre una enfermedad mental denominada "negación de embarazo" y eso fue lo que le llevó a ocultar sus tres embarazos a su esposo y a estrangular a los niños poco después del parto.
La mujer, madre de dos muchachos de 12 y 14 años, se encuentra en prisión preventiva desde hace dos años y medio, cuando se hallaron los cuerpos de dos de los bebés en el congelador del frigorífico de su casa en Seúl, donde residía entonces porque su marido trabajaba en Corea del Sur para compañía estadounidense.
Fue precisamente el marido, Jean Louis, de 42 años, quien descubrió los cuerpos de los dos pequeños el 23 de julio de 2006 y alertó a la policía.
Tras su arresto, la mujer reconoció en total tres infanticidios, el primero de un recién nacido en 1999 en Francia, y los otros dos, nacidos en septiembre de 2002 y diciembre de 2003 en Seúl.
Esta previsto que el Tribunal pronuncie mañana, jueves, su veredicto después de escuchar los argumentos de la defensa. EFE