Anda la vida tejiendo trajes de ilusión, invisibles porque se sujetan bajo la piel, entre el corazón y el alma, y es por eso que algunos incrédulos dudan de su existencia.
Pero, un grupo de jóvenes, a quienes se van sumando muchas personas más, de todos los orígenes, clases, razas, sexo, tamaños, edades, están salvando los sueños y, sobre todo, con esa frase categórica de “toco las estrellas, pero sin que mis pies dejen de estar en la tierra”…
Todo esto viene a cuento del movimiento Yo leí este libro, que se extiende a lo largo y ancho del territorio nacional, “al pasito”; pero, avanzando…
Dos muchachas comunicadoras, de sonrisa grande y corazón repleto de bondades, acudieron al llamado de los conductores del espacio vespertino Qué pasa hoy, que transmite cada viernes este Multimedios DominicanosHoy.Com: Álbida Segura y Yulendy Jorge contaron esto que les confirma que algo lindo se va creando a través de los tiempos de este mundo.
Se trata del proyecto que ha movilizado ya a muchas naciones a través del sabio ejercicio de la lectura.
“Yo leí este libro es una red que se inició en Argentina, como un movimiento independiente y ciudadano”, interviene Yulendy Jorge y agrega: “Consiste en que cualquier persona puede dejar un libro que considere interesante en un lugar, ya sea un centro comercial, un rinconcito bajo la sombra de una calle, un barrio cualquiera del país, donde le parezca; pero, en la primera página debe tener unas instrucciones, a fin de que quien lo encuentre sepa qué hacer con ese libro que no tiene ¨dueño¨”.
“Este movimiento surgió para promover la lectura y compartir las obras incluso con personas desconocidas”, añade Álbida Segura.
Globalizamos la lectura
La frase parece atrapar parte de esta propuesta, cuyo objetivo final es que se lean las páginas de muchos libros, de diferentes temas, que pueden ser de superación personal, religión, una novela, poesía, cuentos, etc.
De muchas maneras, cada ser humano que lo encuentre, añadirá algo más a su conocimiento y será, además, receptor y promotor de un mensaje de amor, solidaridad y compromiso.
Para Yulendy Jorge resulta muy significativo que sea una red espontánea de amigos, sin que se haya realizado ningún estudio mercadológico en su propuesta:
“Es muy difícil desprenderte de un libro que te ha costado mucho y lo tengas contigo, casi como texto de cabecera; pero, se podría comprar una edición más económica para la causa”, expone.
Albida Segura recuerda que las grandes revoluciones del mundo las han realizado los jóvenes, las mujeres y la clase media y coincide con su compañera en el concepto de que “todo comienza con las actitudes y aptitudes, la pobreza no paraliza los cambios. Para reflexionar sobre una conducta no se necesita tener millones…”
El caso es que una iniciativa que comenzó en Argentina, siguió hasta Costa Rica y Colombia, ha llegado a la República Dominicana y ya se propaga, gracias a jóvenes como estas, empeñadas en hacer desde lo individual, todo lo que coadyuve a multiplicar sus mejores frutos en lo colectivo.
Otros países de América y Europa se alistan en esta “conspiración” de nobles promesas para el futuro.
Movimientos de tal envergadura confirman que un mundo mejor es posible y que no se equivocó el poeta, a quien parafraseamos casi al final de estas líneas cuando dijo: que nos tenga cuidado el Amor, que aún podemos cantar su canción…
La dirección del blog es:
Yoleiestelibro-republicadominicana.blogspot.com
Las indicaciones que deben aparecer en la primera página del libro son:
Leerlo:Si usted decide seguir este paso, una vez finalizado o no (puede que decida no leerlo más) debe poner su nombre y apellido en la lista de personas que han leído el libro. Luego debe dejarlo en el lugar que prefiera para que otra persona, así como usted lo hizo, lo encuentre.
No leerlo:En el caso de elegir este paso, le pedimos que deje el libro en el lugar que usted prefiera, para que otra persona lo encuentre y tenga la posibilidad de leerlo.
Venderlo:Si decide llevar adelante este paso, está bien, quiere decir que igualmente este libro le está sirviendo para algo, y además colaboraría con la causa de que alguien lo lea.
Prestarlo:Este sería un buen gesto de su parte. Pero recuérdele a quien se lo preste, que lea las instrucciones para que sepa qué hay que hacer con el libro.
Quedárselo:Ese no sería un buen gesto de su parte. Porque no sólo se estaría quedando con el libro, sino que estaría privando a alguien que lo puede leer.
Destruirlo:Si elige ésta opción es usted el que decide si está haciendo bien o mal.
