El presidente Leonel Fernández habría dispuesto la cancelación de unas 400 habitaciones reservadas por el Departamento de Protocolo de la Cancillería, fuera de las separadas por el gobierno para las delegaciones que participaron en la Cumbre Mundial sobre el Futuro de Haití, realizada el pasado miércoles en Punta Cana.
Fuentes también dijeron a DominicanosHoy.com que los departamentos de protocolo de la Presidencia de la República y de la Cancillería, prácticamente libraron una batalla entre sí por adjudicarse el protagonismo durante el montaje y la realización del evento.
Sostuvo que el enfrentamiento entre los departamentos de Protocolo de la Presidencia y de la Cancillería de la República degeneró una gran confusión entre ministros e invitados internacionales, quienes a su llegada a Punta Cana se veían desorientados.
“El personal encargado de guiar a los ministros e invitados internacionales dieron mucho de que hablar, todo por el afán de protagonismo. Hubo un momento que el Presidente se vio molesto, sería cuando se dio cuenta lo de las habitaciones”, precisó la fuente.
Manifestó que la cancelación de las habitaciones hizo a mucha gente pagar con recursos propios reservaciones en hoteles aledaños y que otros regresaran a la capital. “Hubo personas que aún iban con fines de trabajo, llevaron hijos, madres, esposos, hermanos y hasta primos”, afirmó.
El informante asegura que las autoridades gastaron un dineral durante el montaje y la realización del evento. Luis Manuel Bonetti dijo que en los próximos días el Gobierno informará al país sobre los gastos que incurrió para el montaje de la Cumbre.
El Ministro Administrativo de la Presidencia aseguró que el montaje del evento se manejó con fondos de la Presidencia, y que ahora se está haciendo una evaluación para determinar los gastos generales.
Sin embargo, precisó que por lo general el costo mayor de una cumbre, en primera instancia, está en el alojamiento, pero aclaró que el gobierno dominicano sólo cubrió el alojamiento a los jefes de delegación de los países invitados y que cada país asumió los gastos de los demás miembros de sus respectivas delegaciones.
Aunque no reveló el montó, el funcionario afirmó que se elaboró un presupuesto, pero que, normalmente, hay imprevistos, sobre todo en el caso de una cumbre donde asisten tantas personas.
“Porqué tanto interés sobre el costo de la Cumbre, había que hacerla, era una responsabilidad que el país había asumido. Para el presidente Fernández, como líder de la región y la Republica Dominicana, como país vecino de Haití, era de gran importancia”, indicó el funcionario.
La Cumbre sobre el Futuro de Haití estuvo por el presidente Fernández, como anfitrión y el haitiano, René Préval, y con la presencia de alrededor de 90 misiones internacionales.
La reunión, marcada por la ausencia de varios jefes de Estado y representantes internacionales que eran esperados en Punta Cana, dio continuidad a la cumbre de marzo pasado en Nueva York, donde se acordó la entrega de US$5.300 millones para la reconstrucción de Haití durante los próximos dos años.