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Tras el paso de Emily…

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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DominicanosHoy resume para sus lectores, desde las vicisitudes de una pobre familia, residente en uno de los barrios vulnerables del país, hasta lo acontecido en diferentes localidades del territorio nacional.
 
Debido a que Emily ha degenerado en una baja presión, la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET), descontinúa el aviso de condiciones de tormenta tropical; pero, continuará originando aguaceros de moderado a fuerte en ocasiones.
 
La ONAMET mantiene los avisos contra inundaciones repentinas, o de tipo urbanas, graduales así como deslizamientos de tierra en las zonas de mayor riesgo en las provincias: La Altagracia, La Romana, San Pedro de Macorís, El Seibo, Hato Mayor, Monte Plata, Samaná, Duarte, María Trinidad Sánchez, Espaillat, Sánchez Ramírez, Monseñor Nouel, La Vega, Santo Domingo, Distrito Nacional, San Cristóbal, San José de Ocoa, Peravia, Azua, Independencia, Barahona, Bahoruco, Pedernales y San Juan de la Maguana.
 
Las condiciones marítimas continúan con oleaje anormales asociadas a los remanentes de la tormenta Emily que degenero en baja presión. Todas las embarcaciones deben permanecer en puerto, y los habitantes en zonas bajas costeras deben alejarse de la misma, por vientos y olas anormales.
 
En La Barquita
 
Con el agua a mitad de piernsa, la familia Polanco Martínez se apresuraba a empacar, subir a la mesa y sacar de su casita de madera, convertida en laguna, lo poco que le ha dejado la crecida del rio Ozama en lo que va de año, debido a que han tenido que cargar sus enseres cuatro veces, convirtiéndose cada vez en más pobres.
 
La pareja de esposos, juntos a su hija y nietos de 4, 5, y 9 años, narran con tristeza el pesar que le provoca ver como su cama, estufa, nevera y televisor flotan a punto de sucumbir ante la cantidad de agua que amenaza con arrancar la humilde vivienda.
 
La casita de Domingo y Ramona Polanco muestra las condiciones infrahumanas en que viven, donde la humedad, hacinamiento y miseria convierten su techo en un foco de contaminación, siendo los más perjudicados sus nietos, quienes desde ya viven el calvario que han soportado por 22 años sus abuelos.
 
Lo lamentable de todo esto es que la historia se repite en las 995 casuchas de La Barquita, municipio Santo Domingo Este, capital de República Dominicana.
 
San Pedro de Macorís
 
Los aguaceros caídos en las últimas horas sobre el país, provocaron la evacuación de decenas de familias en San Pedro y el municipio Ramón Santana. Las evacuaciones se produjeron en los barrios San Antón, Villa Faro, Pedro Justo Carrión, Filipinas y en la comunidad Paso El Medio.
 
La comunicación con Paso El Medio se vio afectada por el crecimiento del arroyo Guasa, el cual se desbordó e impidió el tránsito hasta esa demarcación. El Centro de Operaciones de Emergencias trasladó a los afectados a casas de amigos y familiares. Mientras que en horas de la tarde de este jueves, eran entregadas raciones alimenticias en distintos sectores.
 
Monseñor Nouel
 
El distrito municipal de Arroyo Toro se mantiene incomunicado, debido a los constantes aguaceros provocados por la tormenta Emily y la falta de un puente destruido por el fenómeno natural Olga, que azotó al país en el año 2007. Las actividades económicas en Bonao se mantuvieron lentas, pues las personas no se animaron a salir de sus casas por las constantes lluvias.
 
Barahona
 
Fuertes lluvias, ráfagas de vientos, derribo de árboles, el sistema eléctrico afectado y evacuaciones de familias, fue lo que se produjo este jueves por el paso de la tormenta tropical Emily.
 
El director regional de la Defensa Civil, Augusto Moreta Sánchez, dijo que varias familias que residen frente a la playa Bahoruco fueron evacuadas, producto de fuertes oleajes y los vientos que se producen en la zona costera. Mientras que Edesur Dominicana informó que los vientos y lluvias han afectado el sistema eléctrico en Barahona y otras poblaciones.
 
San Cristóbal
 
Al menos 80 familias fueron desplazadas y 100 casas inundadas en el barrio Moscú y otros, ubicados en las márgenes del río Nigua, a causa de las inundaciones originadas por los intensos aguaceros producidos por la tormenta Emily, a su paso por el territorio dominicano.
 
Las 80 familias evacuadas fueron albergadas en el Centro Comunal. Doce retornaron a sus hogares, pese a que están inundados y llenos de lodo. Igual situación se observa en los barrios: La Piña, Concentración, Madre Vieja, Cinco de Abril y Jeringa, Zona Verde, todos levantados a orillas del río Nigua.
 
Para este viernes, las personas afectadas por las inundaciones y dirigentes comunitarios realizarán una jornada de actividades en reclamo de que el gobierno resuelva el problema del drenaje pluvial del sector Moscú y otros barrios que se ven afectados en tiempo de lluvias.
 
En la provincia San Cristóbal, actualmente, viven más de 400 familias en refugios, muchas de ellas desde que el huracán George afectó al país hace 13 años.
 
El refugio, ubicado en el sector Villa Fundación, censado por las autoridades como “Alfa 4”, tiene albergadas unas 238 familias. Mientras en la edificación, donde funcionaba el Departamento de Semillas de la Secretaría de Agricultura, denominado “Alfa 6”, permanecen 138 familias y en La Marina o “Alfa 5”, viven 25 familias.
 
En la actualidad, el gobierno construye 80 viviendas para igual número de damnificados, pero estos temen que su entrega sea politizada y el gobernador provincial favorezca a particulares, como ha ocurrido con otros proyectos.
 
Al concluir estas líneas llovía incesantemente en casi todo el territorio nacional. Pese a las medidas preventivas asumidas por el COE, los hogares dominicanos, sobre todo los de los sectores más empobrecidos del país, se encuentran en alerta, da igual el color que anuncien las autoridades de socorro. Emily ha puesto a la luz las precarias condiciones en que viven miles de familias y a partir de ahora las autoridades de Salud deberán erigir acciones de control epidemiológico, para impedir males mayores.

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