El personal médico del Hospital Francisco Moscoso Puello paralizó sus labores de forma indefinida, en protesta de las precarias condiciones en que trabajan diariamente y al deficiente servicio que se les brinda a los pacientes
Se quejan de que el servicio alimenticio que reciben tanto los médicos como los pacientes es de muy mala calidad, por lo que temen que se produzca un brote de cólera entre los empleados del centro de salud.
En ese sentido, el galeno Juan Reynoso, manifestó que la calidad de los servicios ofrecidos a los pacientes está en el suelo, pese a que se le cobran cuotas de recuperación que va en beneficio del arca del hospital, lo que hace inexplicable que las atenciones sean tan pésimas.
El profesional de la salud, Ochi Batista, narró que la situación es tan difícil que sacaron un paciente del quirófano para trasladarlo a una habitación y cuando estaban en el ascensor este se dañó y permanecieron por hora y medio con el enfermo varado en el elevador.
En tanto, aclararon que sólo serán paralizados los servicios electivos, consultas y cirugías programadas, pero la unidad de cuidado crítico y de cólera estará abierta.
Sin embargo, el director del hospital, Roberto Lafontaine, descalificó la manifestación, argumentado que son reivindicaciones sombrillas que sólo luchan por comida.
“Lástima que se paralicen los servicios de salud por un plato de comida, porque vamos a poner esto en su justa dimensión y más cuando el país esta pasando por una epidemia”, afirmó Lafontaine.
El galeno aseguró que la comida que brindan cumple con los más altos estándares de calidad, contrario a lo que señala el personal.
