Nueva York.- La compañía de tarjetas de crédito MasterCard anunció hoy que perdió 493,3 millones de dólares (3,79 dólares por acción) entre enero y septiembre de 2008, comparado con una ganancia de 781,6 millones de dólares (5,73 dólares por título) en los nueve primeros meses de 2007.
La segunda mayor compañía de tarjetas de crédito del mundo facturó hasta septiembre pasado 3.766 millones de dólares, lo que supone un incremento del 25,7 por ciento con respecto al mismo período del año anterior, en que ingresó por valor de 2.994 millones de dólares.
En el tercer trimestre de este año, MasterCard tuvo pérdidas por valor de 193,5 millones de dólares (1,49 dólares por acción), frente a una ganancia de 314,4 millones de dólares (2,31 dólares por título) en igual trimestre de 2007.
Si se excluyen partidas especiales, la empresa ganó 322 millones de dólares (2,47 dólares por acción), por encima de las expectativas de los analistas de Wall Street, que habían calculado que MasterCard anunciaría una ganancia de 2,22 dólares por título.
La compañía con sede en Purchase (Nueva Jersey) facturó entre julio y septiembre 1.338 millones de dólares, un 23,6 por ciento más que en el tercer trimestre de 2007, en que tuvo ingresos netos por valor de 1.082 millones de dólares.
En el primer semestre, la compañía se había anotado un pérdida neta de 300 millones de dólares. Al 30 de septiembre las instituciones financieras habían emitido 970 millones de tarjetas MasterCard, lo que representa un incremento del 10,3 por ciento respecto de igual fecha en 2007.
El presidente y consejero delegado de MasterCard, Robert Selander, se mostró muy satisfecho con los resultados de la compañía en el tercer trimestre "en tiempos de desafíos económicos sin precedentes".
"Aunque no somos inmunes a los efectos a largo plazo del actual ambiente económico, nos hemos centrado de forma más significativa en nuestra estructura de costes", añadió Selander.
Las acciones de MasterCard subían un 10,79 por ciento hasta los 154,68 dólares en las operaciones electrónicas posteriores al cierre de la sesión regular de Wall Street.
