Ciudad del Vaticano.- El Papa Benedicto XVI afirmó hoy que las enseñanzas del Evangelio "promueven en la población cristiana una mentalidad activa y emprendedora" y que los bienes "tienen que ser gastados, invertidos, compartidos con todos".
El Pontífice se dirigió a los cerca de 60.000 peregrinos que abarrotaban la Plaza de San Pedro para asistir a su tradicional discurso del Ángelus.
El Papa hizo alusión a "la famosa parábola de los talentos, narrada por San Mateo (25:14-30). El ‘talento’ era una antigua moneda romana de gran valor, y precisamente a causa de la popularidad de esta parábola se ha convertido en sinónimo de la dote personal, que cada uno debe hacer fructificar".
De hecho, el texto habla de "un hombre que, a partir de un viaje, llamó a sus siervos y les dio sus bienes" (Mt 25,14). "El hombre de la parábola es Cristo mismo, los sirvientes son los discípulos y los talentos son los dones que Jesús les da", agregó.
"Este es el tesoro que Jesús confió a sus amigos, al final de su breve existencia terrena", dijo el Pontífice.
La parábola -aseguró el Papa- "insiste en la actitud interior para acoger y valorar este regalo".
El Pontífice recordó a los discípulos de Jesús que habiendo recibido ese regalo "son felices por el don recibido, no lo han tenido escondido por temor y celos, y lo han hecho fructificar, compartiéndolo, haciéndolo participar".
"Sí, -agregó- lo que Cristo nos ha dado se multiplica donándolo!. Es un tesoro hecho para ser gastado, invertido, compartido con todos". EFE
