SAN PEDRO DE MACORIS-. San Pedro de Macorís, lo que en el pasado fue uno de las ciudades más próspera de la República Dominicana, hoy se encuentra sumergida en la delincuencia, escasez de agua y desempleo.Este municipio cabecera de la provincia que lleva el mismo nombre, se encuentra situado en el Sureste del país. Sus historias son tan largas como grandes sus problemas.
En San Pedro ya lucen oxidados los rieles por donde rodó el tren que trasportaba la caña de azúcar del terreno de cultivo a la molienda de los ingenios. Pero ya en San Pedro desaparecieron los ingenios, y junto con ello las zonas francas; también, se encuentra de capa caída el turismo, uno de los pilares de la economía.
“Aquí los pobres no tienen autoridades que le duelan .Aquí los políticos cuando llegan, se olvidan del chiquito que está atrás”, expresa José de los Santos un señor de piel morena y edad avanzada que sostiene su familia cargando en una carreta para bueyes lo que le soliciten en el barrio Los Guandules.
José tomó la carreta tras por largos años trabajar como cobrador de guagua, trabajo que por el peso de la edad tuvo que dejarlo.Carga una gorra en su cabeza con la insignia PLD (Partido de la Liberación Dominicana).
Al ser preguntado por si es peledeista lo niega y explica que siempre ha sido blanco, que usa la gorra morada sólo para protegerse del sol.Afirma que la delincuencia y el lodo azotan la barriada.
“Aquí usted no puede irse ni de aquí allí. Apenas sale, un delincuente se mete a tu casa y te lleva todo. Los policías vienen por un momento y nunca apresan a nadie, pese a que conocen bien donde todos viven”, expresa José con la zapiensa que le dan los anos para no seguir dejarse tomar de tonto por los políticos.
José es el espejo a través del que se puede mirar la mayoría de la población de la ciudad de San Pedro de Macorís, quienes en un tiempo orgullosos la llamaban “La Sultana del Este”, por su gran empuje económico se encuentra rezagada y abandonada tanto por el gobierno centra como por las autoridades municipales.
“A las 15 leguas destras 30, antes de que lleguen a Santo Domingo, está un pedazo de esta provincia (la de Cayacoa o Agueybana) donde sale a la mar un lindo río que se llama MACORIX, fertilísima tierra para el pan cazabi y para criar puercos y otras muchas cosas de provisión y mantenimiento".Fue la noticia más completa sobre los terrenos donde hoy esta Macorís, la ofrece el Padre Las Casa en su "Apologética Histórica de las Indias”, luego del descubrimiento de América.
Santiago Mejía, quien aprovecha sus vacaciones de su trabajo como hotelero conchando en un motor confiesa que en San Pedro se han caído todas fuentes de empleo. Expresa que tras la desaparición de los ingenios, tampoco es posible conseguir empleo en zonas francas, el puerto y hasta pequeñas industrias que la crisis económica se las ha tragado.
Actualmente una gran cantidad de obrero despedidos al quebrar el ingenio Porvenir se encuentran esperando por más de seis meses sus prestaciones labórales. Esos obreros, con una carga familiar de cinco y seis miembros se encuentran sentados en sus casas halándose los cabellos ante la impotencia por la inseguridad social en que se encuentran. Muchos, incluso han pensado usar parte del dinero de las prestaciones para pagar un “pasaje de ida” y marcharse en yola a Puerto Rico para no pasar la amarga pena de ver a sus hijos gritarle hambre.
El sector de la pescadería, que en un tiempo fue tan próspero en San Pedro como los ingenios, hoy también luce de capa caída. Los pescadores, ubicados en casuchas improvisadas en torno al Puerto, se lamentan junto a sus yolas en la orilla del río Higuamo. La pesca actualmente se encuentra en “tiempo muerto” camas visto, lo que ha hecho pensar algunos de los pescadores que en el lugar se ha desatado un mal.
A la mayoría de los habitantes, así como a los visitares, le cuesta mucho aceptar que siendo San Pedro de Macorís la mayor zona productora de peloteros de grandes ligas esté sumida en la miseria.
Sammy Sosa, Ricardo Carty, Tony (Cabeza) Fernández, Robinson Canò, Pedro Guerrero, Alfredo Grfin, Jorge Bell, son sólo unos cuanto de las megas estrellas que han amasado grandes cantidades de millones de dólares en el béisbol de grandes ligas, pero nunca han Mirado a su tierra natal como un lugar atractivo para invertir.
