La foto es en blanco y negro, y está vestido con una camisa blanca y corbata hace 40 años, al lado de un joven Muhammad Ali. Su brazo está ubicado sobre el hombro izquierdo del pesado, y Ali está posando como boxeador.
Perdonen a Dundee de 87 años de edad por mirar hacia el pasado; tiene muchos recuerdos y le gusta refrescarlos. Pero dada la oportunidad de ayudar a un boxeador importante a ganar una pelea importante, no pudo resistirse.
Dundee está asistiendo a Nacho Beristain en su entrenamiento de Oscar De La Hoya para su pelea del sábado contra el rey de la libra por libra Manny Pacquiao en el MGM Grand en Las Vegas. Dundee no trabajará la esquina en la noche de la pelea, pero está revisando las cintas y dando sus opiniones sobre técnica y estrategia a De La Hoya.
Dando ayuda para una pelea importante por primera vez en años –y quizás por última vez en su carrera– ha incentivado y energizado a Dundee.
"Es una emoción. Estoy volviendo al pasado a ver gente que he visto toda mi vida", dijo Dundee. "No es como que me estoy chocando contra una pared de ladrillos. Ya hice esto en el pasado. Estuve en muchos rincones".
Dundee fue inducido en el Salón de la Fama Internacional en 1994. Entrenó a 15 campeones del mundo, incluyendo a Ali, Sugar Ray Leonard, George Foreman, Carmen Basilio y José Napoles.
Trabajó en escenas de boxeo importantes con su hermano promotor Chris Dundee, con paradas en el afamado Stillman’s Gym en Nueva York y en el Street Gym de 5th Street en Miami Beach.
"Sabe todo", dijo Basilio, el ex campeón welter del mundo de 81 años de edad. "Cuando Angelo muera, la biblioteca del mundo del boxeo se va a caer a pedazos".
