Con la cancelación deshonrosa de las filas de la Policía de los dos alistados que el pasado jueves despojaron a un comerciante haitiano de la suma de 37 mil euros y dos pasaportes, se eleva a nueve la cifra de quienes han sido dados de baja en formación general en esa institución.
El mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, jefe de la Policía, informó que en lo que va de año se han cancelado cerca de mil agentes.
El sargento mayor Obispo Contreras y el cabo Silverio Sandro Familia Paniagua fueron puestos, además, a disposición de la justicia, después de haber sido señalados como las personas que detuvieron al comerciante haitiano Silver Tupá, en la avenida Mella del sector San Carlos, en la capital.
Tupá fue golpeado y amordazado por los agentes y luego abandonado en una calle de Andrés Boca Chica, donde le auxiliaron los lugareños que posteriormente informaron a la policía.
Guzmán Fermín aseguró que los ex agentes recibirán la pena máxima, como escarmiento por haber manchado el uniforme de la institución, cuya misión es combatir la delincuencia y mantener la paz del país, no lo contrario.
Con la cancelación de estos agentes se eleva a nueve el número de alistados dados de baja deshonrosamente en formaciones generales en lo que va de año.
El jefe de la Policía sostuvo que cada vez que se compruebe la participación de agentes policiales en actos reñidos con la ley, se convocará a formación general para que sirva de escarmiento frente a los demás.
La jefatura de la Policía dispuso la cancelación y el envió a la justicia ordinaria de los referidos alistados, mediante telefonema oficial número 2006-12 a fin de que respondan por sus hechos.
Por otra parte, la Policía reconoció a un grupo de oficiales por el buen desempeño en el ejercicio preventivo.