Washington.- La Reserva Federal de Estados Unidos inicia este lunes una discusión de dos días de su política monetaria y la mayoría de los analistas cree que bajará nuevamente la tasa de interés, que ahora se encuentra en el 1%.
El Comité de Mercado Abierto de la Reserva, que desde octubre ha bajado en medio punto porcentual su meta de interés en los préstamos interbancarios de corto plazo, divulgará su decisión el martes a las 19.15 GMT.
El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, ya dijo dos semanas atrás que la institución seguirá aflojando su política monetaria si ello fuese necesario para aliviar las turbulencias de la economía.
La Reserva inició en septiembre de 2007, cuando su meta de tasa de interés estaba en el 5,25%, una política monetaria generosa, en uno de sus tantos esfuerzos por alentar el gasto de los consumidores, que en EE.UU. equivale a más de dos tercios de la actividad económica.
La economía ha estado en recesión desde diciembre de 2007, el desempleo sigue aumentando y el derrumbe de la especulación inmobiliaria dejó tambaleante el sistema financiero, por lo cual muchos analistas creen que la Reserva cortará medio punto porcentual en su meta de tasa de interés el martes.
Entre los factores a favor de una baja adicional de las tasas de interés se cuenta el hecho de que la inflación se ha moderado, al punto de que algunos analistas empiezan a preocuparse por una deflación.
Según el Departamento de Trabajo, el índice de precios al consumo (IPC) bajó en octubre un 1%, la mayor disminución mensual desde 1947, y en noviembre el índice de precios de productor (IPP) disminuyó un 2,2%.
Asimismo, la Reserva debe considerar el impacto de su política monetaria sobre la cotización del dólar, que al cierre de la semana pasada cayó a su nivel más bajo en 13 años frente al yen.
El dólar también registró su peor semana frente al euro en ocho años.
Durante su reunión anterior, a fines de octubre, los gobernadores de la Reserva estuvieron de acuerdo en que se han incrementado los riesgos de un deterioro del crecimiento.
Los funcionarios bajaron su cálculo de cuánto crecerá la economía de Estados Unidos este año, y de las cifras anteriores de entre 1 y 1,6%, pasaron a una expectativa del 0 al 0,3%.
Asimismo, creen que el próximo año la economía tendrá un desempeño entre una contracción del 0,2% a un crecimiento del 1,1%.
A pesar del abaratamiento del dinero promovido por la Reserva, los bancos siguen más preocupados por reconstituir su solvencia y acumular capital que por facilitar el crédito a los consumidores, y de hecho siguen subiendo las tasas de interés que imponen en tarjetas de crédito.
Aparte de su política en cuanto a las tasas de interés, la Reserva ha estado prestando, en arreglos de corto plazo, más de dos billones de dólares por semana y, para enojo del Congreso y los analistas, hasta ahora no da detalles de quiénes son los prestatarios ni qué acepta como garantías.
El total de préstamos de la Reserva superó la marca de los dos billones de dólares por primera vez en la semana del 6 de noviembre, y ha aumentado un 138% desde el 14 de septiembre, cuando los Gobernadores del Sistema de la Reserva Federal aflojaron sus requisitos sobre garantías.
Al aproximarse la última reunión regular de la Reserva antes de la investidura del presidente electo Barack Obama, los analistas discuten qué más podría hacer el banco central estadounidense después que baje la tasa de interés al 0,5%, como prevén.
Entre otros instrumentos aplicados, la Reserva Federal anunció en octubre la creación de un fondo, nutrido por el Departamento del Tesoro, para la adquisición, sin precedentes, de enormes cantidades de pagarés a corto plazo y sin garantía, a fin de proveer liquidez para el funcionamiento normal de los negocios y el consumo.