Un pajarito nos dijo que ya Ito Bisonó anda “azarando” la unificación del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) y cuestionando que para dónde va el partido con Morales Troncoso, Amable Aristy y Quique Antún, como cabecillas.
Ito, diputado por el Distrito y aspirante a la presidencia del partido colorao, debe tener en cuenta que escenario usa para decir las cosas, porque hay muchas personas que le gusta vivir de contar lo que escuchan.
Bisonó, que nos atreveríamos a decir que tiene pocas posibilidades de alcanzar el máximo cargo a lo interno del PRSC, le ha pasado como a Chacumbele: él mismo se mató.
¿Y quién fue ese barbarazo?
Grafiquemos la escena del crimen como si se tratase de una película: avenida Abraham Lincoln esquina Roberto Pastoriza; vemos a un joven, con guardaespaldas, parado frente a una estación de combustibles, luciendo unos lujosos espejuelos que al instante le fueron arrebatados por un ladronzuelo que se desplazaba en una motocicleta.
Sin pensarlo dos veces, el joven voltea la vista y ordena a su espaldero que mate al ladrón. El guardaespaldas, subalterno al fin, cumple con el mandato, matando al muchachito, de unos 20 años de edad, y subiéndolo al vehículo de su jefe y dejándolo abandonado en un hospital, donde llegó moribundo y, finalmente, falleció.
El guardaespaldas giró a buscar a su jefe y… colorín colorado, el cortometraje ha terminado.
Esto no es una película, fue un sucedo real; pero todavía no hemos logrado identificar al protagonista para que pague por el crimen cometido. ¿Usted lo conoce?
¡Oye el otro!
Pero que hombre más chistoso es el procurador Radhamés Jiménez; ahora dice que darán a conocer los nombres de los autores intelectuales de la matanza de Paya en el mes de enero o en febrero. Será dándole chance a que huyan que están, porque si se sabe quiénes son, no se puede dejar que pasen las navidades “sueltos y sin vacunar”. ¿Cuándo será Señor que arreglaremos esta jungla?