El 52% de los haitianos ha cruzado o ha intentado cruzar la frontera con destino a la República Dominicana, de esos el 97% logró pasar sin muchas dificultades. Así lo establece un estudio realizado por organizaciones haitianas y dominicanas con influencia a ambos lados de la frontera.
Uno de los más importantes aspectos descubierto por la investigación es que los policías y militares haitianos son percibidos en ambos lados de la frontera como los principales violadores de los derechos humanos.
Según el sondeo, esta cifra migratoria fue posible pese a que el 83% de las personas que lograron cruzar la frontera dijeron que no disponían de documentos legales.
La investigación hecha por Solidarité Fontwalye de Juana Méndez (Haití) y el Servicio Jesuíta para los Migrantes Refugiados, arrojó que el 54% de las personas que viven en la parte haitiana hábil para el trabajo están sin empleo.
Mientras el 41 por ciento de los dominicanos que viven en la frontera Norte no tienen empleos, según el sondeo.
Además, el estudio reveló que el flujo de ciudadanos haitianos que cruza la frontera hacia República Dominicana se da con bastante regularidad en la frontera Norte y lo hace el 34%.
La investigación sobre la “Situación de los Derechos Humanos en la Frontera Norte, entre República Dominicana y Haití", también permitió identificar una serie de situaciones que influyen en las tendencias y patrones de violación de los derechos de los ciudadanos en esa zona.
Las organizaciones señalaron la zona o control fronterizo, los controles militares, las cárceles, los destacamentos policiales y los mercados, como lugares de alto riesgo y los grupos más vulnerables.
La investigadora Vielka Polanco Morales reportó que las opiniones dadas por los encuestados establecen que las principales violaciones en la frontera las cometen los militares dominicanos con un 58% y los policías haitianos con un 44%.
Asimismo, revelan que la falta de un reglamento regulatorio por parte de los gobiernos de los dos países, acorde con la realidad migratoria que viven sus ciudadanos, propicia la ilegalidad institucional y las violaciones a los derechos elementales de las personas.
El estudio identificó la caracterización de los grupos vulnerables. En ese orden, sostienen que en Haití, acorde con este estudio sobre la realidad fronteriza, el 35% de las mujeres constituyen la población más vulnerable.
En tanto, en dominicana sólo se reportó un 22% padecen graves problemas de violencia intrafamiliar y abuso sexual. Esta vulnerabilidad de las mujeres está seguida por los jóvenes haitianos de uno y otro sexo con un 26% y los dominicanos con un 5%.
El 18% de los migrantes en Haití tienen una alta vulnerabilidad y sólo un 5% lo percibe en República Dominicana.
Los entrevistados mencionaron a los jueces como parte de los violadores de sus derechos del lado haitiano y dominicano. Sobre este contexto, puntualizaron que el 25% de los jueces haitianos violan los derechos de los ciudadanos con problemas judiciales.