La piña se le ha puesto agria al volátil jugador, ya que los gerentes generales también se han olvidado de que con su sola presencia en la alineación de los Dodgers de los Angeles cambió el rumbo de ese equipo y lo clasificó a la siguiente ronda.
Tras su paso arrollador por los Dodgers, se pensó que Manny sería un material de primera línea en el interés de los gerentes generales de los diferentes equipos, pero no ha sido así.
Esto ha creado preocupación en el entorno de Ramírez, cuyo agente Scott Boras está bajando la guardia.
Boras, quien no hizo caso a una oferta de US$45 millones por dos años hecha por los Dodgers a Manny, ha comenzado a flexibilizar y se está acercando al equipo de los Angeles.
Boras contactó a los Dodgers, luego de informes en el sentido de que el equipo de Los Angeles tenía en la mira a los toleteros Adam Dunn y Bobby Abreu.
El gerente general de los Dodgers, Ned Colletti, dijo que recibió un mensaje de voz de Scott Boras en torno a Ramírez, lo cual constituye el primer contacto entre ambas partes desde las Reuniones Invernales al principio de este mes.
“Me dejó un mensaje de voz”, dijo Colletti. “Estoy seguro de que hablaremos en los próximos días.” El mercado para Ramírez ha sido prácticamente inexistente.
La oferta de los Dodgers de dos años y US$45 millones, con una opción de US$15 millones para una tercera temporada -hecha en octubre y retirada después del 14 de noviembre- sigue como la única extendida al dominicano, que cumplirá los 37 años de edad en este año 2009.
