Murió el domingo en la clínica Cruz Jiminián, el cantante Rafael Antonio Curiel (Tony), quien fue velado en la Funeraria Savica y sepultado en el cementerio Cristo Redentor. Le sobreviven sus hijos Eddy, Angelita, Angel y Desiré.
Curiel fue un destacado cantante en su juventud, oriundo de Santiago de los Caballeros, era el padre de la ex-vedette y actriz Angelita Curiel (La Mulatona).
El artista, que estaba aquejado de problemas de salud, había sufrido varias embolias, la última ayer, según informó su hija Desiré.
Rafael Antonio Curiel Batista nació en la ciudad de Santiago de los Caballeros el 26 de julio de 1931 y a corta edad se trasladó con su madre a San Pedro de Macorís, donde realizó sus estudios en las escuelas públicas y más tarde se interesó en hacer prácticas de mecánica dental, oficio en el que llegó a destacarse.
Junto a estos estudios y desde muy temprano fue descollando Tony como cantante y su voz era requerida en muchas actividades realizadas en San Pedro.
En 1954 se trasladó a la capital del país y realizó sus primeras apariciones en la radio y en el programa Buscando Estrellas, de La Voz Dominicana, le fue otorgada una beca para realizar estudios de música. Tony Curiel tuvo la orientación de insignes músicos, tales como el Maestro Dolores Cerón, Mario Ferretti y Dora Merteen, entre otros.
Su voz se fue cultivando hasta permitirle en 1956 aparecer en el papel de Alfio en la ópera Caballería Rusticana, de P. Mascagni, y en 1957 es el Giorgio Germont de La Traviata, de G. Verdi. En ambas oportunidades compartió con un elenco integrado por figuras estelares del canto lírico nacional.
La buena formación y el enorme talento del señor Curiel le permitieron incursionar en diversos géneros, por lo que en 1959, con la Orquesta San José, dirigida por el trompetista y compositor Ramón Antonio Molina, grabó doce boleros en un disco de larga duración que llevó por título Quiero verte.
Para 1962 grabó en un sencillo el vals peruano No te Vayas, de Javier Arce, y el bolero Miedo de quererte; en 1963 grabó un sencillo con el tango Sombras en un arreglo de bolero. Muchas son las piezas que quedaron grabadas en su voz y cada una de ellas es representativa de una alta calidad y de una exquisita voz.