El jefe de la Marina de Guerra, vicealmirante Julio César Ventura Bayonet, confirmó este viernes lo que DominicanosHoy.com publicó, de fuente, el pasado 30 de enero, sobre la cancelación de siete oficiales superiores y subalternos por vincularse a viajes ilegales.
En aquella oportunidad DominicanosHoy.com informó que la Marina de Guerra dominicana habría cancelado ocho oficiales, entre ellos un capitán de corbeta, por su alegada vinculación a una red dedicada al tráfico ilegal de cubanos hacia Estados Unidos.
Los oficiales apartados de las filas de las Marina de Guerra son académicos graduados en la Escuela Naval, y pertenecían a la Comandancia de Puerto en Boca chica.
La red de traficante de cubanos hacia Puerto Rico y Miami, utiliza lanchas rápidas y turísticas, y cobran entre 25 y 30 y mil dólares. La fuente explicó que esa red de tráfico ilegal existe desde hace años, y conocida por todos los gobiernos.
Por tal motivo, unos 29 oficiales superiores de la Marina de Guerra fueron rotados, en un esfuerzo de la institución por contrarrestar el delito del narcotráfico y los viajes ilegales, así como mejorar las áreas relacionadas con los programas de educación y salud.
Este viernes, Ventura Bayonet informó la cancelación de siete oficiales superiores y subalternos, con lo que suman 40 los marinos sacados de las filas de la institución por vincularse a viajes ilegales, narcotráfico y otras acciones delictivas.
Asimismo, dijo asimismo que la Marina desmanteló en la zona Este varias fábricas clandestinas de construcción de embarcaciones para viajes ilegales a Puerto Rico.
Reveló que en enero canceló los siete oficiales superiores y subalternos, por estar vinculados a una red de traficantes de dominicanos y cubanos hacia dicha isla, en barcos veleros que llegaban a polos turísticos.
Con ese grupo de oficiales, dos capitanes de corbetas, un teniente de navío y cuatro tenientes de fragata, suman 40 los cancelados por el Poder Ejecutivo, por recomendación de la Jefatura de la Marina.
Declaró que mediante una investigación de la Dirección de Inteligencia M-2 se determinó que los siete oficiales estaban vinculados con una red de tráfico ilícito de personas hacia Puerto Rico.
Los cancelados son los capitanes de corbeta Amílcar Rafael Soto Candelario y Beethoven B. Matías Alba; el teniente de navío Jonathan José Jiménez Peña; el alférez de navío Alonso Ferrera Mercedes, y los alférez de fragata Rafael Montero Mateo, Francisco Tejeda Ramírez y Francisco Valera González. Prestaban servicios en distintos puntos del Este.
Anterior a este grupo, fueron cancelados de la Marina otros 33 oficiales superiores y subalternos, entre ellos algunos que fueron ligados a la matanza de los siete colombianos en Paya, Baní, ocurrida a principio de agosto de 2008.
