Madrid.- Las asociaciones de exiliados cubanos en España coinciden en que no hay cambios que apunten a una transición democrática en Cuba después de un año en el poder de Raúl Castro, ni esperanza en que los pueda haber en los próximos meses.
Estos colectivos consideran que las reformas emprendidas por Castro tras suceder a su hermano Fidel en la jefatura del régimen son "tímidas y cosméticas" y no se han traducido en más libertad, sino en más represión a la disidencia.
El portavoz del Movimiento Cristiano Liberación (MCL) en España, Carlos Payá, declaró a Efe que "el pueblo ya no espera nada del Gobierno de Raúl Castro y no se ven expectativas de cambio, más allá de algunas cuestiones cosméticas".
"El balance de Raúl es más poder, más represión y una apatía tremenda en la población. Ante esta situación, son los cubanos los que tienen que empezar a tomar iniciativas", agregó.
El hermano del disidente Oswaldo Payá lamentó que América Latina haya "abandonado" a los cubanos, por lo que pidió a la UE y a España que ocupen su puesto y promuevan el diálogo en la isla.
La presidenta de la Federación Española de Asociaciones Cubanas, Elena Larrinaga, expresó su decepción por la gestión de Raúl Castro al considerar que el país está "parado" y que no ha habido avances en materia de derechos humanos o en la economía.
Larrinaga cree que Raúl Castro podría ser la persona idónea para liderar la transición democrática, siempre que apueste por el entendimiento entre todos los sectores, con libertad y respeto.
El coordinador de Unión Liberal Cubana (ULC), Antonio Guedes, tampoco ve cambios en Cuba, ni siquiera en la figura de Fidel Castro, "quien sigue marcando la pauta ideológica".
Los últimos cambios en el Gobierno no son indicativos porque "los nuevos son de la vieja guardia", señaló Guedes, quien sostiene que "no habrá cambios hasta que no estén Fidel y Raúl".
El portavoz de ULC afirmó que lo único distinto son las visitas de mandatarios extranjeros, a los "se les hace ver que Cuba va a cambiar, pero, en la práctica, no es así".
El presidente de la Plataforma Cuba Democracia Ya, Rigoberto Carceller, consideró que "poca cosa puede hacer Raúl Castro, aunque quiera", porque quien sigue dirigiendo el régimen es Fidel.
Para Carceller, el Congreso del Partido Comunista Cubano, previsto para el próximo mes de octubre, puede ser el punto de inflexión si Raúl Castro asume "todo el poder, se llena de dignidad y le evita a Cuba una confrontación civil".
El presidente de la Asociación Española Cuba en Transición, Matías Jové, discrepa en que ese congreso pueda suponer un gran cambio en Cuba, aunque confía en que favorezca las conversaciones entre los reformistas que hay en el régimen.
También dijo que los cambios impulsados por Raúl Castro no han sido reales, sino que han restado espacios de libertad a los cubanos, a pesar de que el deseo del pueblo es que las reformas sean inminentes.