Santiago (RD (EFE).- La economía de República Dominicana puede registrar un crecimiento positivo este año a pesar de la crisis financiera global, afirmó hoy en Santiago (norte), el superintendente de Bancos del país, Rafael Camilo.
Camilo, no obstante, observó que todo dependerá del comportamiento de los principales actores de la economía nacional y del manejo del Gobierno frente a las consecuencias que inevitablemente se derivarán de las crisis financiera, inmobiliaria y económica que se presentan en grandes naciones como EEUU.
Durante la conferencia "Situación y perspectivas 2009 de la economía dominicana", auspiciada por el capítulo de Santiago de la Cámara Americana de Comercio, Camilo dijo que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) podría estar entre el 2,6% y el 3%, mientras que la inflación se situaría entre un 5% y un 7%.
"El sector zona franca se mantiene en una franca recuperación, lo cual es muy alentador para la economía dominicana", insistió.
En ese contexto, explicó que el año pasado, el sector que mayor crecimiento experimentó fue el de las comunicaciones, pero que "lamentablemente" es el que menos empleos genera.
Para el funcionario, la República Dominicana registró aumentos "significativos" el año pasado en áreas como turismo, construcción, banca privada y remesas.
Aseguró, asimismo, que el sistema financiero dominicano no ha sido impactado negativamente por la crisis económica e inmobiliaria de Estados Unidos.
El sistema financiero local cuenta con unos 600.000 millones de pesos en activos y del total de bancos, dos concentran el 65 por ciento de los recursos, uno del Estado y el otro del sector privado, según Camilo.
En su opinión, en la medida que la política monetaria siga siendo más flexible, se producirá un efecto favorable en la liquidez del mercado que impactará positivamente a los sectores productivos de la economía.
También declaró que las autoridades esperan que la baja paulatina de las tasas de interés estimule el crecimiento de la cartera de préstamos, lo cual sería evidente a partir del segundo semestre de 2009.
Asimismo, estimó que el crecimiento sería moderado por menor dinamismo en algunos sectores tales como el turismo, zonas francas, industria manufacturera y por el menor flujo de remesas y capitales.
El superintendente de Bancos fue reiterativo en que el sector financiero local goza de "suficiente" confianza del público, porque mantiene una incuestionable solidez y confiabilidad.
