Varias entidades defensoras del medio ambiente rechazaron este vienes el proyecto de ley aprobado y declarado de urgencia por la Cámara de Diputados, el cual intenta cercenar y limitar el Parque Nacional del Este.
Las organizaciones consideraron como una mentira insostenible el “argumento de que el Parque Nacional del Este constituye un obstáculo a las inversiones y el desarrollo”.
Asimismo, entienden que el área que fue vendida a inversionistas italianos constituye una violación a las normas jurídicas dominicanas.
Las instituciones protectoras son: Comisión Ambiental de la UASD, Academia de Ciencia, Coalición para la Defensa de las Áreas Protegidas, Asamblea Nacional Ambiental, Consorcio Ambiental Dominicano, Foro Áreas Protegidas, Grupo Jaragua, Manglares del Este, Grupo Ecológico Tinglar, Sociedad Ecológica Higueyana, Grupo de Santo Domingo y la Asociación de Pescadores de Boca de Yuma.
En ese sentido, el rector de la UASD, Franklin García Fermín, indicó que este hecho evidencia el fracaso moral de la sociedad política dominicana, cuyos representantes actúan en defensa de los intereses y divorciados del interés nacional y el servicio de los capitales e inversiones dudosas en su origen.
Sostuvo que los terrenos vendidos están en las parcelas 92-H, 92-M, 92-P y 92-Z y sus mejoras en el distrito catastral número 10/3era, en el municipio de Boca de Yuma, adquiridas por las empresas FULCASA S.A; Playa Verde del Caribe C x A. y posteriormente a Stratstonral State.
De esta forma han violado las leyes nacionales contando con que el Congreso Nacional cambiará la legislación para validar y legalizar la inversión.
Entiende como mentira el hecho de que para desarrollar un bien patrimonial sea necesaria su privatización y la creencia de que la pobreza es producto de la protección de áreas.
A su entender estos son sólo sostenibles cuando existe la firme voluntad de convertir en gestión privada, los bienes de dominio público y hacerlo a precio de gato muerto.
También expresó que entregarán el documento con el rechazo al Congreso, dado que se prevé que en la agenda de los diputados está la aprobación en segunda lectura del proyecto.