Bagdad (EFE).- El Ejército de Estados Unidos seguirá efectuando operaciones militares en Irak, a pesar de la retirada de sus soldados de las ciudades iraquíes a finales del próximo junio, afirmó hoy el portavoz castrense Frederick Rudesheim.
"Que nos retiremos de las ciudades no significa que suspenderemos nuestras operaciones bélicas" en Irak, señaló Rudesheim en una rueda de prensa en Bagdad.
El pacto de seguridad firmado por EEUU e Irak a finales del 2008 y que entró en vigor en enero pasado, estipula la retirada definitiva de las fuerzas estadounidenses del país árabe antes del 2012, que en la actualidad ascienden a unos 142.000 efectivos.
También establece que los soldados estadounidenses se replieguen de las ciudades iraquíes antes de que termine el primer semestre de 2009.
Rudesheim avanzó, además, que a finales de este mes entregarán al Gobierno iraquí el control de la base de Al Rostomiya, en el sur de Bagdad, considerada la más importante de las estadounidenses en Irak.
Asimismo, "el 30 de junio de 2009, las tropas se retirarán de las ciudades, pero continuarán adiestrando, equipando y ofreciendo apoyo, además de crear un sistema logístico moderno, para las fuerzas de seguridad iraquíes", explicó.
También afirmó que el pacto, que determina los principios fundamentales que regulan la presencia y retirada de las fuerzas de la coalición multinacional de Irak, será la guía principal para los uniformados de EEUU cuando se replieguen de los municipios iraquíes.
"Hemos comenzado a trabajar para disponer de los medios para cumplir el acuerdo, hay un entendimiento común (con las autoridades iraquíes) y claro en la aplicación de las medidas", indicó el portavoz.
Además, Rudesheim reiteró el compromiso del Ejército estadounidense de retirarse de Irak a principios de agosto de 2010, "tal y como lo anunció el presidente" de Estados Unidos, Barack Obama.
El 27 de febrero pasado, Obama señaló que la mayor parte de las tropas estadounidenses abandonará Irak para agosto de 2010; tras esa fecha, sólo quedarán en el país árabe entre 35.000 y 50.000 soldados en funciones de adiestramiento, equipamiento y asesoría a los uniformados iraquíes.
Los últimos militares estadounidenses deberán abandonar Irak antes de finales de 2011.