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El Gobierno, los médicos, las huelgas, el pueblo

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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El conflicto entre los médicos y el gobierno nos hace pensar en la relación que existe entre ellos, y como se vinculan las huelgas y el pueblo. Todos, exceptuando la huelga, son partes del Estado.

El gobierno es el conjunto de hombres y mujeres que administran ese Estado en la forma establecida por la constitución, las leyes y sus reglamentos.

Los medic@s es un sector de la población cuya preparación y misión es para intervenir en el proceso de salud y enfermedad del pueblo.

La huelga es un recurso utilizado por grupos humanos en contra de quienes lo dirigen, para lograr el cumplimiento de sus demandas o propósitos.

Ahora, tal como ustedes están esperando saber, ¿quién es el pueblo?

El pueblo somos todos los nacidos en este país, los que dirigen y los dirigidos, mientras que las estructuras (Jurídicas, Políticas y Económicas) pertenecen al Estado; los seres humanos, sin importar su nivel de vinculación con el Estado, son el pueblo.

Todos estamos obligados a cumplir los mismos derechos y deberes, y nadie está por encima de estos, es decir, la ley.

El gobierno tiene instrucciones precisas de nuestra Constitución y las leyes, de garantizar las necesidades de nuestra sociedad, entre tantas: la salud y la educación. Cuando los partidos políticos acceden al Estado, son investidos de poderes que hace que muchos, no importa su procedencia, pierdan el sentido de la realidad y se sientan por encima de todos los ciudadanos de este país.

Los gobiernos tienen como norma el incumplimiento de sus compromisos y promesas, produciendo una gran deuda social que en el transcurso del tiempo erupciona como un volcán y cuyo magma arrastra todo lo que encuentra en su camino.

En todos los casos, siempre el gran afectado es el pueblo de abajo, el que cumple las leyes, el que paga sus impuestos, el que produce la riqueza, el que quita y pone gobernantes…

Este gobierno no escapa a lo antes señalado, en teoría finge apoyar la salud y la educación, y en la práctica no le asigna en el presupuesto lo que estos sectores requieren y en donde la inversión en estos son de los más bajos de Latinoamérica.

Mientras se asigna el 2% y el 2.3 % del PIB en salud y educación, sucesivamente, el pueblo aporta dentro del gasto en salud la diferencia equivalente al 5% del PIB, conociendo que el gasto en salud del pueblo dominicano es de 7.3 % del PIB.

Los ejes referentes principales, relacionados al desarrollo de un país son: salud y educación, y no se puede dar buena salud, ni buena educación con unos recursos humanos desmotivados, mal pagados, desacreditados y maltratados.

Es imposible vivir el día de hoy con un sueldo promedio de RD$ 23 mil pesos en un país donde todo sube y nada baja, si no pregúntenle a los senadores, los diputados y los regidores que trabajan a veces, o a ciertos funcionarios con sueldos exorbitantes y no trabajan 24 horas como los médicos y el sector salud, los guardias y los policías.

El pueblo se divide entre los de arriba y los de abajo, los que tienen y los que no tienen nada.

Los que tienen son menos del 10% de la población y los que no tienen son más del 90% de la población.

La ley de seguridad social divide al pueblo en tres regímenes de financiamiento: contributivo, contributivo-subsidiado y subsidiado.

En una población de cerca de los diez (10) millones de personas, 3 millones (30%) pertenecen al régimen contributivo, 2 millones (20%) al régimen contributivo-subsidiado y 5 millones (50%) al régimen subsidiado.

Es así que 7 millones de dominicanos no tienen acceso a un servicio de salud oportuno y de calidad, siendo su única posibilidad la de asistir a los hospitales públicos.

Las huelgas, justas o no, perjudican a los más pobres, los que tienen van a las clínicas privadas, donde su seguro le garantiza los servicios de salud. En estos establecimientos de salud no hay huelgas.

Ya he dicho que las huelgas deben ser contra el gobierno y no contra el pueblo.

Cuando paralizamos los hospitales afectamos al pueblo, no al gobierno y mucho menos a un gobierno que se ha mostrado insensible y desinteresado de los reclamos de esta sociedad.

Cada huelga en este país deja mas de 7 millones de dominicanos sin servicio de salud, estos son los verdaderos perjudicados, recordemos que los contributivos son los que trabajan, los que cotizan al sistema (30%), pero no todos los que cotizan van a la consulta privada por múltiples razones, si no que muchos de estos van a los hospitales públicos.

Más de 7 millones de personas no pueden estar padeciendo un problema que ellos no han generado.

El gobierno está en la obligación de resolver la situación de miseria en la que se encuentran los recursos humanos del sector salud, hay que deponer actitudes que en nada benefician al pueblo y hay que brindar un clima que propicie el advenimiento del sector, por el bien de todos.

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