La presidenta de la Asociación de Comerciantes de Bayahíbe-Dominicus, Yahaira Angomás, ha enunciado su preocupación por la poca presencia de turistas, atribuyendo que el cuadro era más común cada día debido a la crisis económica, razón por la que muchos de los visitantes extranjeros y nacionales dejaban de visitar la zona.
Igual preocupación embargaba a los capitanes de los barcos que viajan a las islas Saona y Catalina, quienes aguardaban ansiosos por clientes. También los taxistas que trasladan a turistas a diferentes puntos del país se quejaban del poco flujo de clientes. Ni siquiera la presencia de un crucero había logrado impactar, ya que muchos turistas no bajan de la embarcación.
Mientras, Carlos Sánchez, del sindicato de Choferes Turísticos, ha expresado que los ingresos habían caído en más de un 50% con relación a épocas anteriores. Ha citado que aunque muchos hoteles tenían buena ocupación los turistas no salían a pasear porque al parecer venían con poco efectivo.
El año pasado llegaron por el aeropuerto La Romana 186,294 visitantes para una merma significativa con relación al 2007 cuando llegaron 207,442. Al mes de enero el saldo fue negativo, ya que de 382,055 visitantes que llegaron al país, sólo cerca de 19,000 lo hicieron por La Romana. A enero del 2008 por ese punto habían llegado 27,517 turistas.