Pekín.- La tuberculosis se ha convertido en "una amenaza para la salud pública mundial y nos encontramos en un punto de inflexión al que tenemos que hacer frente", explicó Cornelia Henning, coordinadora del programa de tuberculosis de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en China.
"Es una enfermedad antigua, mortal, que se contagia principalmente por el aire y que afecta a los pulmones pero que se puede desarrollar también en otros órganos", apuntó la doctora.
Según Henning, "de ser tratada adecuadamente puede ser vencida".
China uno de los países con mayor número de infectados "ha progresado significativamente en la lucha contra la tuberculosis y podría llegar a solucionar su situación, así como ayudar a otros países a superar esta enfermedad", señaló.
La tuberculosis es una enfermedad contraída por la bacteria Mycobacterium tuberculosis, cuyas cepas desarrollan una fuerte resistencia a los medicamentos.
Vinculada en muchos casos al virus de inmunodeficiencia adquirida y al sida, se estima que en 2007 causó la muerte de 1,7 millones de personas y que 4.400 personas mueren cada día.
A pesar de que un tercio de la población mundial posee la bacteria, sólo entre un cinco y un diez por ciento desarrolla con el tiempo la enfermedad.
Gracias a los progresos en su cuidado y control, desde el 2003 el número de casos por infección han disminuido.
En 2007 se dieron nueve millones de nuevos casos, un 63 por ciento de ellos fueron atendidos por "Stop TB" (detengan la tuberculosis), una iniciativa liderada por la OMS y por el Banco Mundial (BM), con un 85 por ciento de éxito.
"Stop TB" es un movimiento global creado en 2000 para combatir la enfermedad y que agrupa a diferentes organismos multilaterales, gobiernos, empresas, y organizaciones no gubernamentales.
Sin embargo, si los medicamentos se utilizan mal, puede presentarse la tuberculosis multi-resistente MDR-TB, una forma de tuberculosis que no responde al tratamiento habitual, lo que suele ser consecuencia de un inadecuada administración de los medicamentos básicos.
Una segunda forma de resistencia es la drogo-resistente XDR-TB que aparece cuando los casos de MDR-TB han sido mal tratados.
Los tratamientos del XDR-TB son más caros y más limitados.
"Prácticamente no tenemos armas para vencerla", sentenció la especialista.
La doctora dijo que "la mayor parte de la gente infectada con el XDR-TB no se puede permitir pagar los fármacos, no los administra adecuadamente o simplemente abandona el tratamiento cuando comienza a sentirse bien".
"Para cortar el grifo a la tuberculosis es necesario garantizar los recursos financieros tanto nacionales como internacionales, financiación en investigación para mejorar las pruebas de diagnóstico, y desarrollar nuevos fármacos o vacunas", explicó Henning.
La semana próxima se celebrarán en Pekín unas jornadas organizadas por la OMS, el Ministerio de Salud chino y la fundación Bill y Melinda Gates, a la que asistirán líderes, ministros y representantes de 27 países, y donde se estudiarán los diferentes procesos para combatir la enfermedad. EFE