NUEVA YORK.- José Reyes llegó al majestuoso Citi Field, nueva casa de los Mets de Nueva York, que tuvo un costo de 800 millones de dólares, cargado de optimismos y de muchas cosas buenas que puede hacer este equipo en el verano de este 2009.
“¡Wao es sorprendente y maravilloso este parque de pelota. Estoy aquí y no lo puedo creer. Nos han premiado con esta moderna arquitectura y nosotros tenemos que recompensar a nuestra fanaticadas!”, expresó Reyes totalmente emocionado.
El electrizante campo corto dominicano, que nació en el municipio santiagués de Villa González y que después de la temporada del 2006 es considerado uno de los mejores jugadores de su posición en el béisbol, adelantó que los Mets tienen un equipo para ganar la Serie Mundial.
Reyes, que a la ofensiva ofrece una combinación de poder y velocidad, lo cual lo convierte en un bateador peligroso y que a la defensiva no se queda atrás con una fuerza de brazo y puntería de gran calidad, expuso que los Metros de este año son muy diferentes a los de otras temporadas.
Reyes jugó dos partidos en el Citi Field (ambos de exhibición), contra los Medias Rojas de Boston. El primer partido fue ganado el viernes pasado por los Mets 4-3 y en el segundo Boston salió por la puerta grande 9-3.
A comienzos de 2003, José Reyes se integró al equipo de los Mets como un novato. Ese no fue el año de Reyes.
En 2006 hubo un cambio en su carrera. Se convirtió en uno de los mejores primer bate de las grandes ligas con 64 bases robadas, 81 carreras impulsadas (lo cual es excepcional), 30 dobles, 19 cuadrangulares y más de 15 triples con un promedio de .300 por el año completo. Ayudó a llevar a los Mets a los playoffs, algo que no se hacia desde 2000.
Desde ese 2006 las campañas han sido inolvidable para el dinámico torpedero quisqueyano.
El año pasado bateó para .297, con 68 carreras remolcadas, 113 anotadas, 16 cuadrangulares, 19 triples, 37 dobles, 56 bases robadas y por primera vez en su carrera conectó más de 200 hits en las Grandes Ligas (204). En el 2007 se estafó 78 bases, estableciendo nuevo récord para la franquicia de los Mets.
El criollo quiere seguir almacenando números y su meta inmediata es superar sus números anteriores y también quiere saborear ese afanado trofeo de campeón.
Dice que ellos (los Mets), batallarán fuertes en la división Este de la Liga Nacional, sin fijarse en nadie. Sabe que tienen un buen equipo y que pueden competir con los mejores.
