Teherán.- Irán aseguró hoy que está dispuesto a continuar con las negociaciones sobre el programa nuclear, pero precisó que la comunidad internacional debe ajustarse a la nueva realidad y a los cambios que se han producido en este campo.
Así se lo transmitió hoy el principal negociador nuclear iraní, Sedi Yalili, al Alto Representante de Política Exterior y Seguridad de la Unión Europea, Javier Solana, durante una conversación telefónica.
"La República islámica es favorable a las discusiones con el grupo 5+1 (integrado por los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania) en el marco de una cooperación constructiva", dijo Yalili, a quien cita la agencia de noticias Isna.
Según la fuente, ambos responsables conversaron sobre el contenido del comunicado que el 5+1 emitió el pasado miércoles, en el que se invitaba a Irán a retomar el diálogo sobre su controvertido programa nuclear.
La radio nacional iraní subrayó, por su parte, que Irán emitirá un comunicado de respuesta al 5+1 en los próximos días.
La comunidad internacional, con Estados Unidos, Israel y la Unión Europea a la cabeza, acusan al régimen iraní de ocultar un programa nuclear paralelo cuyo objetivo último es la adquisición de un arsenal de armas atómicas, extremo que Irán rechaza.
El domingo, el presidente del Parlamento iraní y antiguo negociador nuclear, Ali Lariyani, ya anunció que su país aceptaría volver a la mesa de negociación, pero que cualquier nuevo intento debe ceñirse a las normas del Tratado de No Proliferación Nuclear, del que Irán es signatario.
Lariyani, que asesora al líder supremo de la Revolución Islámica iraní, ayatolá Alí Jamenei, en cuestiones nucleares, advirtió, asimismo, de que algunas de las opciones planteadas por los miembros del 5+1, como el aumento de la vigilancia y la supervisión, "carecen de legalidad".
En este sentido, el presidente del Parlamento iraní volvió a sugerir que la negociación no debe limitarse únicamente a la polémica nuclear.
El enésimo intento de solución se produce en un nuevo marco, propiciado por el deseo de acercamiento a Irán expresado por el presidente norteamericano, Barack Obama, y los últimos avances en el campo de la energía nuclear anunciados por Teherán.
El mandatario demócrata se ha pronunciado favorable a abrir un nuevo capítulo con el régimen de los ayatolá si éste abre el puño y renuncia públicamente a sus supuestas aspiraciones militares.
Irán ha respondido que en ningún caso renunciará a sus derechos nucleares.
Como prueba factible, el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, inauguró el pasado jueves la primera planta nacional de producción de combustible, con la que Irán cierra la cadena de autosuficiencia nuclear. EFE