La noticia podría ceñirse a ser sólo eso: “una buena noticia”, por la posibilidad que tendrán grandes figuras artísticas de la cultura dominicana de recibir pensiones que les ayuden a llevar una vida con algunas de las necesidades esenciales satisfechas. Pero, la reflexión tiende a ser mucho más profunda, sobre todo si se piensa en quienes han alcanzado las más de ocho décadas de existencia, sin haber tenido el reconocimiento que merece su obra.
Según informó la prensa nacional, el presidente Leonel Fernández concedió pensiones especiales a un grupo de 26 reconocidos músicos y cantantes, a los cuales se suman, además, bailarinas, teatristas, artistas plásticos, un escritor y otras destacadas figuras de la cultura popular.
El decreto 321- 09 favorecerá con pensiones de hasta 40 mil y 15 mil pesos mensuales, otorgadas de acuerdo a la edad, “carencias económicas y una trayectoria de servicio realmente trascendente y aportadora a la cultura nacional”, tal y como expresó el secretario de Estado de Cultura, José Rafael Lantigua al anunciar la puesta en vigor de la medida presidencial.
Finalmente, una de las glorias de la pianística y eminente educador musical en el país, Vicente Grisolía, verá elevada su pensión hasta 40 mil pesos, justo ahora cuando arriba a sus 84 años de edad y, obviamente, su pródiga existencia anda por las postrimerías.
Si se suman los años de servicio de estas personalidades, en general, hay cifras que marcan los más de 65, 57, 40, 25 y 20 años de servicios…
Toda una vida dedicada a engrosar esa fila de hombres y mujeres dedicados a crear y hacer nuestras vidas “humanamente mejor”. Las palabras de Lantigua hacen pensar: “Se trata de las ola más grande de pensiones especiales que se haya otorgado a artistas, escritores y gestores culturales en toda la historia”.
Mejor tarde que nunca, repetiría el refranero popular. Mujeres y hombres, “servidores públicos en el área de la cultura”, han tenido que esperar muchos años de sus vidas para tan merecido tributo. Aún quedan pendientes en el país muchas otras glorias para ser reconocidas…