Berlín.- La canciller alemana Angela Merkel expresó hoy su más absoluta condena por la muerte de dos rehenes de dicha nacionalidad, integrantes del grupo de nueve extranjeros secuestrados desde el sábado en el Yemen, entre ellos una familia germana con tres hijos de cuatro, tres y un año.
"Estamos haciendo cuanto está en nuestras manos por saber del destino del resto de los rehenes", dijo la canciller después de que su ministro de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, confirmase este martes la muerte de las mujeres, dos enfermeras y estudiantes de teología de 24 y 26 años.
La muerte de las dos mujeres "es una muy triste noticia", pero no hay que dejarse llevar por "especulaciones precipitadas" sobre su trasfondo y pormenores, sino que es preciso lograr el total esclarecimiento de los hechos, dijo Merkel.
De acuerdo a la práctica alemana de observar la máxima cautela ante este tipo de casos, Steinmeier había hablado hasta ahora siempre de "desaparecidos", mientras en los medios se sucedían informaciones contradictorias sobre el destino del grupo y posible autoría del secuestro.
Tras confirmar la muerte de las dos mujeres alemanas, Steinmeier dijo que partía de la base de que los restantes cinco alemanes están "capturados y en manos de un grupo armado".
El ministro indicó que siguen por determinar las causas de la muerte de las enfermeras, a las que los medios alemanes identifican como Anita G. y Rita S., ambas estudiantes en una escuela bíblica del estado de Baja Sajonia y que habían pedido hacer sus prácticas en Yemen con la ONG Worldwide Service.
Al grupo pertenecía también una familia originaria asimismo de Baja Sajonia y formada por Johannes y Sabine H, un técnico y una enfermera, ambos de 36 años y padres de Lydia, Anna y Simon, de cuatro, tres y un año.
Fuentes yemeníes informaron ayer de que habían sido hallados los cuerpos de tres mujeres -las dos enfermeras alemanas, más una maestra surcoreana de 34 años.
Tras lo cual se afirmó que se habían encontrado vivas a las dos niñas y que estaban a salvo, extremo no confirmado desde Berlín e información que no se ha visto hoy verificada por fuente oficial alguna.
Los cuerpos de las fallecidas tenían impactos de bala y heridas de arma blanca y fueron localizados en la zona de Akuan, en el este de la provincia de Saada, adonde el grupo había ido de excursión.
Todos ellos trabajaban en un hospital de la región de Saada, como voluntarios en el caso de las dos enfermeras muertas, y además de los siete alemanes y la coreana, había un ciudadano británico, de 45 años e ingeniero.
Desde Sanaa se ha responsabilizado del secuestro a un grupo terrorista vinculado a Al Qaeda.
Las fuentes gubernamentales yemeníes precisaron asimismo que la zona del hallazgo, conocida como Wadi al Nashuf, situada en la región montañosa y tribal de Akuan en la provincia de Saada es vecina de una región saudí que, según la fuente, es una plaza fuerte de la red terrorista islámica. EFE