La Fundación “Vida sin violencia” está alarmada por el incremento en el país de los casos de violencia intrafamiliar, que ya ha causado 70 muertes en los primeros cuatro meses del actual año (un promedio de 17 víctimas por cada treinta días); en tanto que en las Fiscalías barriales existieron unas 2 mil 615 denuncias.
Eso ocurre aquí, en la República Dominicana y en Argentina, periodistas y comunicadores elevan sus voces y denuncian que: “la violencia de género es un delito -en tanto y en cuanto constituye una¨ conducta antijurídica que debe ser prevenida y sancionada-, un problema social, un atentado contra el derecho a la vida, la dignidad, la integración física y psíquica de las mujeres y una cuestión concerniente a la defensa de los derechos humanos”.
En días pasados, fiscales de Portugal y España llevaron a cabo una jornada sobre violencia machista y propusieron que ambos países asignaran un protocolo de actuación en esa materia, a fin de reforzar la cooperación civil y penal en contra de los feminicidios.
En defensa de una propuesta común y el establecimiento de un protocolo, ambos países convinieron en que “cualquier petición en materia de violencia de género -a ambos lados de la frontera, española o portuguesa- se convierta automáticamente en ´preferente´, para que la atención a la víctima prevalezca por encima de cualquier otra causa judicial”.
De manera que España y Portugal trabajan unidos y con medidas concretas que acaben con el "virus" de la violencia de género. Pero, en la nación dominicana, las medidas asumidas no han dado aún sus frutos.
Ni hablar de las más de setecientas mujeres víctimas de violencia intrafamiliar, que en los últimos siente meses del pasado año recibieron atenciones en el Centro de Atención a Sobrevivientes de Violencia de la fiscalía del Distrito Nacional.
Precisamente, fue el ex fiscal de dicho Distrito, José Manuel Hernández Peguero, quien inició esta Fundación que difunde el mensaje de: “La violencia intrafamiliar atenta contra tu dignidad”.
Es cierto que el Ministerio Público “garantiza no sólo la persecución legal de los agresores, sino una atención integral multidisciplinaria a las víctimas” y también es verdad que se observa un aumento en las denuncias de maltratos; pero, el hecho mismo de asistir a un mayor número de “feminicidios íntimos”, concluye que quizás las penas previstas para estos terribles daños, no están a la altura del mal ocasionado, no sólo en la víctima, si no además, con los hijos e hijas que desde temprana edad sufren estos terribles traumas.
Será a través de protocolo e integración de medidas fiscales, u otras formas más, pero algo muy fuerte tiene que detener en la República Dominicana la violencia de género.