El Quinto Juzgado de la Instrucción de la provincia Santo Domingo envió a juicio de fondo los acusados de asesinar la periodista Helen Suriel Pujols, el pasado primero enero en su residencia del sector Los Tres Brazos.
El tribunal tomó la decisión luego de pasar más una hora conociendo la vista preliminar del caso.
No obstante, los abogados de los acusados pretenden excluir del expediente al capitán de la Policía, Fausto Encarnación Domínguez, hermano del matador, un ex novio de la victima, con cuya arma de reglamento le dio muerte.
El acusado directo de la muerte de la comunicadora, es Junior Domínguez, su ex novio, quien utilizó para cometer el hecho el arma de reglamento de su hermano el capitán de la Policía, Encarnación Domínguez, quien presenta cargos por complicidad.
La periodista Suriel Pujols murió a consecuencias de un disparo que le hizo su ex novio, el primero de enero, en su residencia del sector de Los Tres Brazos, en momentos que conversaba vía telefónica con la señora Adelina Almonte Cruz. Junior Domínguez se presentó al lugar y disparó sin mediar palabras contra Pujols.
Se le acusa de violar los artículos 295, 296, 297, 298 y 304 del Código Penal Dominicano y el 39 de la Ley 36, que sanciona el asesinato y porte ilegal de arma.
En tanto que su hermano está acusado de violar los artículos 59, 60, 295,296 y 297 del Código Penal, los cuales sancionan la complicidad.
El padre de la víctima, Nicanor Suriel Adames, pidió que todo el peso de la ley caiga contra los acusados de la muerte de su hija.
La comunicadora, de 28 años, fungió por cinco años como directora de Relaciones Publica de la Secretaría de Estado de Interior y Policía y mantuvo un trabajo constante en los programas de esa entidad, dirigidos al combate de la violencia, sin saber que ella sería víctima de la misma, que ha segado cientos de vidas en la República Dominicana.
Desde muy joven, Helen se entregó en cuerpo y alma a la labor social en el sector, Los Tres Brazos, donde trabajó a favor de los que no tiene voz y en contra de las injusticias sociales.
La comunicadora fue asesinada vilmente por un despechado, quien esperó que estuviera sola, entró a su habitación y llegó hasta su cama, mientras ella realizaba trabajos en su computadora, trabajando en su tesis de grado de la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
El suyo fue el primer feminicidio del 2009, dejó en la orfandad a la niña Glory, de 9 años, quien padece de espina Bífida, por lo que requiere atención las 24 horas y a Yadil de 3 añitos.
Tanto su madre, Altagracia Pujols, como su tía, la también periodista Providencia Rossi Pujols, reclaman a las autoridades judiciales que los responsables caiga todo el peso de la ley.
Expresan que nada les devolverá la alegría y paz espiritual, pero que su castigo servirá de ejemplo para aquellos hombres que todavía no han entendido que el amor no se obliga, se gana.
