Residentes en el sector de Capotillo de la capital se presentaron este lunes ante el fiscal Alejandro Moscoso Segarra, para anticiparle que moradores han identificado a uno de los supuestos militares que ultimaron a tiros a dos jóvenes del lugar en medio de una protesta la semana pasada.
El vocero del Bloque de Organizaciones Comunitaria, Abel Rosa, dijo que cinco personas están dispuestas atestiguar en contra del militar de quien dicen desconocer el nombre, pero si físicamente.
Rosa expresó que presentarán su querella ante la fiscalía de Capotillo, para que las autoridades empiecen un proceso legal en contra del supuesto homicida e investiguen a fondo si existen otros culpables del doble crimen que terminó con la vida del los jóvenes Miguel Ángel Encarnación y Carlos Francisco Peguero.
Los comunitarios denunciaron que los motivos que ocasionaron las protestas siguen vigentes sin que ninguna autoridad del gobierno haga acto de presencia, con excepción del fiscal Moscoso Segarra.
Sostuvieron que el agente señalado como culpable del hecho sigue prestando servicio en la institución y patrullando las calles del sector de Villa Consuelo, pese a que sus superiores conocen de las acusaciones en su contra.
Igualmente, pidieron que se tome carta en el asunto y que estos sean presentados ante la sociedad para que otros no cometan el desliz de usar sus armas en contra de personas indefensas.
Los munícipes comunicaron al representante del Ministerio Público que tienen personas dispuestas atestiguar porque éste en una de sus visitas al popular sector le anunció que sirvan como testigos para identificar a los responsables de las muertes.
De su parte, Alejando Moscoso Segarra se comprometió a someter a la justicia para que sean los jueces que determinen la sanción que merecen de ser encontrados culpables.
El miércoles pasado un hombre y un menor, de 13 años, resultaron muertos a tiros durante las protestas realizadas desde las 3:00 de la tarde en el sector de Capotillo, por los largos apagones y el alto costo de la vida.
Los muertos son Carlos Valentin Franco, de 24 años, y Miguel Ángel Encarnación, de 13, quien se dedicaba a limpiar zapatos, y murió al ser intervenido de emergencia en el Hospital Moscoso Puello.
Los familiares de Franco acusan a agentes policiales de disparar dentro de la casa donde vivía, en la Respaldo Doctor Betances, esquina 6, del referido sector