La dirección de Ford España ha anunciado que despedirá a 600 trabajadores de la fábrica valenciana de Almussafes debido al exceso de personal que ha sido provocado por el recorte de la demanda y la producción (1.460 unidades al día previstas para 2009).
La empresa, que necesita eliminar uno de los tres turnos de trabajo que mantiene en la actualidad, ha planteado a los sindicatos reducir la plantilla mediante bajas voluntarias. Las negociaciones se reanudarán en septiembre, cuando se retome la actividad en la planta tras las vacaciones.
Cerca de 7.000 empleados trabajan en la planta valenciana de Ford y alrededor de 1.100 están adscritos al tercer turno. La empresa, cuya matriz, Ford Motor, alcanzó unos beneficios de 2.260 millones de dólares (1.584 millones de euros) en el segundo trimestre de 2009, acumula ya tres Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) temporales.
El último afectó a 298 personas. A pesar de la mejora de las ventas gracias a los programas nacionales de achatarramiento que se han implantado en diferentes países europeos, el mercado de vehículos nuevos se encuentra todavía en una situación de "gran debilidad", ha señalado la empresa, que justifica los despidos en la necesidad de asegurar su viabilidad.