El título de este artículo se lo dedico a la señora de oficio doméstica, de momento.
Vil e infamemente engañada por una “mala praxis” de un político. Reciba usted mi respeto, y creo que a todos y todas los que hemos visto ese vídeo, algo nos revolvió la vida. Se le debería exigir a este servidor público indemnizar a esta señora, además, de devolverle mes por mes los veinte mil pesos que alguien de forma inhumana se adueñó, y una disculpa pública tanto a ella como al país por su actuación.
Indudablemente que una nación, país o un Estado requiere del esfuerzo conjunto de todos y cada uno de sus ciudadanos y ciudadanas. No existe varita mágica, ni color, ni héroes o heroínas. Somos cada uno de nosotros los llamados a levantar el ancla de la solvencia, rectitud, trabajo, eficiencia, y salir a la mar en busca de ese horizonte perdido…ese horizonte que no queremos topar ni llegar-una ceguera psicológica-sencillamente, no queremos poseer el sentido de la visión.
Esta triste conclusión es a la que he llegado tras no dejar de inmutarme aunque parezca infantil de las noticias. Algunos ricos no pagan la luz, algunas empresas tampoco, algunos pobres menos. Es de suponer que con la cultura política que tenemos tampoco las pagarán algunos de que los echaron su voto “morado”. Entonces, ¿quienes están pagando la luz? Es la siempre golpeada clase media.
¿Cuándo será que los dominicanos y dominicanas vamos a entender que es de los impuestos que el Estado cumple con los compromisos?
Por lo que debemos y tenemos que pagar la luz, el agua, la basura, todos y cada uno de los impuestos y, a la vez, exigirles a las autoridades que se nos suministren dichos servicios. Comprando plantas eléctricas de uso individual, tirando la basura fuera del alcance del mal olor de nuestro domicilio, construyendo una cisterna, es decir, creando nuestro propio “Mini-Estado”, un “Búnker” y que todo siga igual, yo me acomodé…
Ahora: ¿cuántos cumplen? Sí, me refiero a los políticos, líderes, dirigentes, tienen sus facturas al día, porque se debe predicar con el ejemplo, las podrán enseñar durante la campaña electoral. O veremos ¿un programa especial de TV de las facturas de “impagados” de los candidatos y candidatas en el 2010?
Un modelo a seguir “de sí se puede” es España. Como es de todos conocidos, España, hasta la década de los ochenta, era un país sólo conocido por la emigración-especialmente-en Latinoamérica, menos en Europa. Yo me crié escuchando de mi padre a esa España profunda: Galicia, devastada por la guerra civil y con un Gobierno dictatorial. Entonces, en aquellos años sólo se visitaba España, turísticamente y, con fines de estudios, literatura, exiliados intelectuales o políticos.
Todavía hay personas que creen que España es la Comunidad de Andalucía o la ciudad de Barcelona, y por supuesto, su capital: Madrid. Siempre les digo a mis amistades: España es el día a día y eso es un placer vivirlo. Vas a un Restaurant de “menú del día” (entre 8 a 10 €) y tienes al obrero que está trabajando en la calle con su “mono”, al de la oficina con traje y corbata, etc., comiendo lo mismo y recibiendo iguales atenciones. Esto es sólo un ejemplo de la vida cotidiana española. Este mismo trato en las personas se objetiva en los hospitales, en las oficinas públicas, tan es así, que no se sabe ¿quién tiene un título universitario y quién no? Eso no tiene relevancia para la vida cotidiana ni para que tus derechos sean respetados.
Esto lo saco a colación, porque los españoles han dado un ejemplo al mundo, a tal punto de colocarse en la octava potencia mundial. Ahora, y es de todos conocidos, es el daño de la crisis mundial, pero estoy segura que saldrá, y esta lección en la caída de las finanzas hará resurgir al país con otra percepción, y diferentes líneas alternativas de producción económicamente hablando.
¿Cómo se logra esto? Con mucho trabajo, dinamizando la economía en todos los sectores, pagando todos sin excepción sus impuestos pero con el incentivo de reinvertirlo en mejora global y particular en cada uno de sus habitantes. En síntesis, una buena gerencia, administración y gestión de los recursos por parte del Estado y del Gobierno de turno.
¿Es triste, muy triste leer que hay personas compadeciéndose de los probables despidos de las “nominillas” en CDEEE? Otro no quiere entregar un vehículo asignado. Yo, sinceramente, creía que a estas alturas habían tenido la dignidad personal de renunciar. Así, seguiremos estando a años luz de la civilización. Una nación indisciplinada, megalanaria, siempre escudada y enquistada mentalmente por un voto que echó, eso no sé cómo se cataloga. Aunque no dudo de que la República Dominicana tiene una buena base de datos de hombres y mujeres para salir de ese túnel, pero se necesita la voluntad política: el pueblo los seguirá.
Si somos incrédulos, y no nos creemos capaces como país del tercer mundo de salir a flote, pues, sí con trabajo, dedicación y servicio a su país. Viajemos por las noticias a Centroamérica: Bolivia, y vemos como un presidente “indio” como despectivamente le han denominado, ha sido galardonado: uno personal por la ONU como “Héroe Mundial de la Madre Tierra,” y otro como “Líder en Políticas de Salud Pública. Sin muchos ruidos, sin muchos viajes, pero al parecer está resolviendo en un país sin petróleo y sin mar…
Madrid-España.
