Caracas.- Representantes de la oposición y de los sectores pro gubernamentales utilizaron hoy las calles de Caracas para dar relevancia a sus posiciones políticas sin que se registraran incidentes violentos.
La oposición efectuó una marcha desde el este de la ciudad hasta la sede del hotel del ALBA, en el centro, donde entregaron a un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores una petición para que se autorice la visita al país de una delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
La marcha, convocada por grupos estudiantiles, sirvió para que los principales partidos de oposición resaltasen su presencia con pancartas y banderas.
Las más notorias correspondieron a Acción Democrática (AD), Un Nuevo Tiempo (UNT), Copei y Alianza Bravo Pueblo (ABP).
Al llegar a las inmediaciones del hotel ALBA una comisión de diez estudiantes se trasladó hasta el recinto donde estaba el funcionario y le entregaron el documento mientras en el exterior algunos de los manifestantes gritaban "victoria".
La petición para que la CIDH visite Venezuela parte de la presunción de que el Gobierno venezolano "persigue la disidencia política" y que, en consecuencia, existen "presos políticos".
El Gobierno del presidente Hugo Chávez ha rechazado ese enfoque y ha explicado que la responsabilidad que acarrea infringir el Código Penal no puede evadirse alegando persecución política, es decir, que los presos de la justicia ordinaria no pueden considerarse "políticos".
José Miguel Insulza, secretario de la Organización de Estados Americanos (OEA), organismo al que está adscrita la CIDH, aclaró esta semana que la visita pedida por la oposición solo podrá realizarse si es aceptada por el Gobierno venezolano.
El Ejecutivo ha rechazado hasta ahora esa posibilidad por entender que varios miembros de la CIDH no son imparciales frente a Venezuela como lo demuestra, según sostienen, que no hayan condenado el golpe de Estado de 2002 contra Chávez, a pesar de ser una flagrante violación de los Derechos Humanos.
Por su parte, estudiantes "revolucionarios" instalaron en las cercanías del Ministerio de Relaciones Exteriores la "I Base Popular Estudiantil por la Paz" en un ambiente festivo, amenizado por grupos musicales instalados en una tarima.
Alejandro Padrón, uno de sus portavoces, dijo que las bases por la paz se contraponen a las bases por la guerra "como las que van a utilizar las tropas estadounidenses en Colombia".
"Llevamos un mensaje de paz frente al mensaje de odio y terror de la oligarquía", añadió el representante de ese sector estudiantil.
Sobre la posibilidad de que una delegación de la CIDH llegue a Venezuela plantearon que es "triste que en lugar de sentarse a debatir sobre los problemas del país, la oposición opte una vez más por pedir la intervención extranjera".
Ambas demostraciones se desarrollaron sin incidentes aunque deslucidas por el mal tiempo que registró la capital venezolana. EFE