MINNEAPOLIS.- El pelotero venezolano estelar de los Tigres de Detroit Miguel Cabrera se disculpó con sus compañeros por haber bebido el pasado fin de semana entre dos partidos que perdieron los Tigres cuando estos intentaban conquistar el campeonato de la División Central de la Liga Americana.
Cabrera, que se encuentra sumido en un bache ofensivo, estuvo en la alineación de los Tigres en el partido de desempate que perdieron este martes por el campeonato de la División Central de la Liga Americana.
Antes del comienzo de la práctica de bateo, Cabrera dijo a los periodistas que lamentaba sus acciones y la preocupación que le había causado a la organización e insistió que el consumo de alcohol no tuvo un efecto negativo en su desempeño.
"No, no, no. Estaba bien, estaba concentrado", añadió Cabrera.
El pelotero venezolano se fue de 4-0 y dejó a seis corredores en las almohadillas en una derrota de 5-1 ante Chicago el sábado, un partido que comenzó unas 12 horas después de que el gerente general del equipo Dave Dombrowski lo rescató de una estación de policía después de haber tenido un pleito con su esposa, al parecer por su llegada tarde a casa tras haberse ido de juerga.
La policía dijo que la esposa de Cabrera, Rosangel, llamó al número de emergencias 911. Ambos presentaban rasguños en el rostro cuando llegó la policía, pero eran leves y no se presentaron cargos.
Cabrera, de 26 años presentaba una concentración de alcohol en sangre de 0,26, tres veces superior al limite máximo permitido para conducir en el estado de Michigan.
Cabrera está en la segunda temporada de su contrato por ocho campañas y 152,3 millones de dólares.