Puerto Príncipe.- La Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (MINUSTAH) anunció hoy que se tomaron disposiciones concretas para encaminar la investigación del accidente de un avión de la fuerza de la ONU el pasado viernes y que dejó un saldo de once muertos.
El lugar del accidente fue asegurado y "permanecerá bajo control de seguridad hasta que todos los elementos de información necesarios para la investigación hayan podido recogerse", según un comunicado de la MINUSTAH.
El organismo recordó que "de acuerdo con las normas internacionales, los investigadores del país propietario del avión (Uruguay), de fabricación (Casa-212 fabricado en España) y Haití, examinarán el pecio para determinar las causas de esta tragedia".
También, expertos de las Naciones Unidas participarán en la investigación, "que podría extenderse sobre varias semanas", advirtió la MINUSTAH.
La Misión confirmó que mañana se celebrará una ceremonia en Puerto Príncipe para despedir a las once víctimas del accidente, que el sábado fueron trasladadas a la capital de Haití.
La ceremonia tendrá lugar en el campo del contingente brasileño, en la periferia norte de la capital. Los cuerpos de las víctimas serán repatriados el mismo día a Uruguay y Jordania, sus países de origen.
Los fallecidos son seis militares uruguayos y cinco jordanos que perdieron la vida al estrellarse el aparato en el que volaban, un Casa-212.
La aeronave se estrelló contra una montaña cerca de la localidad de Ganthier, cuando sobrevolaba la frontera entre Haití y la República Dominicana, y la misión de la ONU ha abierto una investigación para esclarecer las causas del siniestro, ocurrido en una zona de turbulencias.
La MINUSTAH fue creada en 2004 por el Consejo de Seguridad para restaurar el orden tras el violento derrocamiento y salida del país del presidente Jean Bertrand Aristide.
El Consejo de Seguridad de la ONU tiene previsto renovar el mandato de la misión este lunes para que siga garantizando la seguridad en el empobrecido país antillano, al tiempo que ayuda a fortalecer las instituciones locales.
MINUSTAH cuenta con un contingente militar de 7.000 miembros y otro policial de 2.000, en los que participan varios países latinoamericanos como Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Paraguay, Perú, y Uruguay, así como España, Francia, Italia, Jordania, Canadá, y Estados Unidos, entre otros.