El cambio climático, el narcotráfico y la criminalidad organizada, la dependencia del combustible, la brecha digital y del conocimiento, las contradicciones entre las naciones que tienen relaciones con nuestro país, la dependencia alimentaria y la problemática haitiana, son los principales retos que confronta la República Dominicana, de acuerdo con el diputado Pelegrín Castillo.
El legislador de la Fuerza Nacional Progresista hizo la afirmación en la ponencia “Retos Externos de la República Dominicana, Soberanía a Prueba”, dictada en la sede del Instituto Tecnología del Cibao Oriental (Universidad ITECO), organizada en Cotuí por el Consejo Nacional de Fronteras (CNF).
A la actividad asistieron Esclarecida Núñez de Almonte, rectora del ITECO; Radhamés Batista, presidente del Consejo Nacional de Fronteras, así como diplomáticos, autoridades de la cancillería, docentes e invitados especiales.
El señor Castillo expresó que hay una integración mundial de los espacios físicos cada vez mayor, fruto de la globalización, y que este fenómeno es irreversible para todos los pueblos de la tierra.
El dirigente político manifestó que hay una ideología globalizada de las fronteras, y que a vamos a perder el control de las decisiones fundamentales, ya que nunca antes lo global había tenido tanto efecto en lo local.
“Si analizamos el balance socio-económico mundial nos daremos cuenta de que los países que han tenido proyectos nacionales fuertes e integrados han logrado mejores resultados, y ejemplo de este es Chile, que ha producido cambios políticos profundos, excelentes resultados para esa nación”, agregó el diputado.
Castillo entiende que los desafíos externos que tiene la República Dominicana podrían traernos grandes perjuicios para el país, por lo que no podemos estar tranquilos.
En cuanto a la problemática haitiana, agregó que “vemos los efectos de una migración desbordada, que no es sólo un simple problema migratorio, sino un asunto de carácter regional donde la comunidad internacional no quiere implicarse en un esfuerzo de reconstruir ese país, por miles de millones y por los grandes esfuerzos que esto implica”, dijo.
Expuso que “es mucho más fácil para algunos países que la República Dominicana sea la administradora de la crisis haitiana, pero no podemos asumir este rol”.
Castillo está convencido de que el Estado Dominicana está perdiendo el control de la frontera y de la política internacional para el enfrentamiento de este tema.
Por último, ve necesario que nuestro Estado debe unirse, movilizarse y hacer todos cambios necesarios para poder completar estos grandes retos que confrontamos, y que la prioridad debe ser fortalecer el proyecto nacional, que está muy debilitado.