Reservándose la diputación por María Trinidad Sánchez que ocupa Isabel Bonilla, el partido oficialista estaría cobrándole a la legisladora su rebeldía a las líneas de la cúpula durante el proceso de reforma constitucional aprobada por la Asamblea Revisora.
Aparentemente, la legisladora perderá seis años del “pastel” congresual, al no poder competir nuevamente por esa diputación por la provincia María Trinidad Sánchez.
Este miércoles, durante su intervención en el programa “El Día”, la diputada dio señales de que no contará con el apoyo del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Bonilla prácticamente se despedía de sus labores como legisladora y dijo textualmente frases como: “en mis seis o siete meses que me quedan como legisladora”, “yo me siento satisfecha por la función que desempeñe en la Cámara de Diputados, entre otras.
Se recuerda que el doctor Leonel Fernández y el presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Miguel Vargas Maldonado; firmaron un acuerdo sobre la reforma constitucional, y que a su vez era una “línea” a cumplir los legisladores de ambas organizaciones políticas.
Durante los debates sobre la reforma de la Carta Magna, la diputada Isabel Bonilla había declarado que los asambleístas eran presas de la dirigencia de sus respectivos partidos, que llegan al punto de chantajearlos para que voten a favor o en contra de determinada iniciativas.
En el seno de su partido (PLD), a Isabel Bonilla se le ha visto como una “rebelde” por su posición independiente ante artículos de la reforma constitucional, como la confirmación de la penalización del aborto y los límites a la población al acceso a las playas del país.
Este miércoles, la diputada Bonilla reveló que la repetición del período legislativo de los actuales senadores y diputados estaba sujeto a si obedecían o no a las líneas de la cúpula del partido, en lo que ella no participó, y por lo que fue excluida.
“Los legisladores reciben presión por cuestiones electorales, su reelección o no depende de sus actitudes, se han convertido en agentes de cambio en los meses que le quedan, yo correré el riesgo de mantenerme con mis criterios disidentes”, subrayó.
Calificó como una falta de respeto las declaraciones del presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez, quien declaró que su actitud de rebeldía era porque estaba “sangrando por la herida”.
Dijo que se mantendrá firme antes las líneas del PLD, por entender que los legisladores deben atender el mandato del pueblo.