MIAMI.- Un umpire cubano de renombre mundial desertó a Estados Unidos y comenzó una nueva vida en Miami, centro de la mayor comunidad de exiliados cubanos en el país.
El periódico en español El Nuevo Herald afirmó que Nelson Díaz llegó el domingo a Miami con su esposa, Maritza Ladrón de Guevara, y sus dos hijas.
Díaz dijo que una de las primeras cosas que hizo en Estados Unidos fue colocar flores en la tumba de su madre, quien falleció en Miami antes de que pudiera verla.
Su carrera de 26 años presuntamente finalizó cuando fue designado para el segundo Clásico Mundial en Japón y no fue porque las autoridades del béisbol cubano le dijeron que no tenía permiso para viajar debido a que no confiaban en él.
Como umpire, participó en juegos olímpicos, copas mundiales y juegos panamericanos, entre muchas otras competencias.