Algo está funcionando mal, los dominicanos no están captando, durante estas fiestas de fin de año, el mensaje de prudencia y reflexión de la iglesia, católica y evangélica; los organismos de socorro y sectores sensatos de la sociedad.
Así se evidencia en los resultados, nada alentadores, de la primera etapa del operativo “Nacer Navideño 2009”, en prevención de hechos lamentables. El último informe del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) habla de 29 muertos y 337 heridos.
Debe mover a preocupación la cantidad de menores de edad intoxicados por bebidas alcohólicas y como siempre, el dolor de cabeza que representan los accidentes de tránsito, mayormente de motocicletas. La familia requiere que los padres asuman sus responsabilidades frente a sus hijos.
La sociedad necesita acercarse más a los valores cristianos, principalmente en tiempos como estos, que son para reflexionar y estar más en familia. Que Dios ilumine los corazones de los dominicanos para que no se sume un muerto más en estas festividades.
