Santiago.- El padre jesuita Regino Martínez rechazó este lunes la instalación de un campo de refugiados para albergar a 100 mil haitianos damnificados del terremoto que afectó ese país la semana pasada.
Martínez es coordinador de la organización no gubernamental Solidaridad Fronteriza de la provincia de Dajabón.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM), con sede en Ginebra, dijo que junto al Gobierno de ese país, pretende crear un campo para albergar a 100 mil damnificados del sismo de Haití.
Martínez, que es un defensor de los inmigrantes haitianos en el país, dijo que en Haití hay lugares suficientes para acoger a esos 100 mil haitianos que plantea como refugiados la OIM.
Subrayó que el Gobierno dominicano ha dado su apoyo solidario al pueblo haitiano ante la catástrofe que lo ha afectado.
En ese contexto, el jesuita explicó que por ahora el planteamiento que se impone es ayudar a los haitianos para que den respuestas a sus problemas, pero en su propio país.
Indicó que más que pensar en refugio, lo que hay es ayudar a los haitianos para que trabajen sobre la base de buscar una alternativa diferente a la que había antes del terremoto. ”Porque si había un estado fallido, ahora hay un estado sepultado”, insistió.
“Entonces sacando de Haití a 100 mil refugiados no es la solución y mucho menos viniendo para acá”, indicó.
Para Martínez es muy rápido plantear sacar haitianos a ese nivel, sin antes pensar como eso se puede hacer en el propio Haití.
“Si es a nivel de refugio en Haití, hay lugares suficientes para hacerlo y si salen 100 mil haitianos para República Dominicana es para atenderlos como refugiados”, indicó.
Sostuvo que la ayuda solidaria que está llegando hace que esos haitianos tengan su propio refugio en Haití.
“Me parece que es muy precipitado plantear refugios de haitianos fuera de su país”, insistió el padre Martínez.
Dijo que el apoyo solidario que ha ofrecido el Gobierno y el pueblo dominicano hacia Haití es más que suficiente, por lo que dice que sería contraproducente tratar de imponerle un refugio temporal de haitianos en su territorio.