Madrid.- El piloto madrileño Carlos Sainz aseguró después de recibir el homenaje de su ciudad tras ganar el Dakar, que esta era una prueba que le hacía muchísima ilusión, ya que cuando se retiró del campeonato del mundo "era el objetivo".
Sainz se mostró muy contento por ser "el primer español en ganar el Dakar en coches". "Era una prueba que me hacía mucha ilusión ganar. Cuando me retiré del campeonato del mundo me la puse como objetivo, y este año lo hemos conseguido. Cuando uno consigue su objetivo es una gran satisfacción", aclaró el madrileño.
El piloto dijo que su objetivo ahora "a corto plazo es descansar". "Como tengo la suerte de que la carrera es anual, tengo tiempo para decidir que vamos a hacer. Lo primero de todo es saber si el equipo va a volver, si va a participar el año que viene. Desde luego si no participa el equipo, yo no creo que participe. Y si vuelve el equipo, pues lo pensaré", aseguró Sainz.
El doble campeón del mundo de coches calificó este homenaje como "indescriptible". "Aquí en la Plaza Mayor, en tu ciudad, bajar a la Cibeles y dar una vuelta es para estar encantado. Estoy muy contento de que podamos haber traído el coche para que los madrileños puedan ver el Touareg con el que hemos ganado la carrera", explicó Sainz.
El piloto no ocultó su satisfacción por ganar el Dakar, aunque no quiso dar más importancia a esta victoria que a otras que ha tenido a lo largo de su carrera deportiva. "En la vida de uno los retos y las ilusiones van cambiando. Lo importante es afrontarlos con la misma ilusión y las mismas ganas".
Sainz también tuvo palabras de cariño y admiración hacía su copiloto en el Dakar Lucas Cruz, del que dijo que "sin él no hubiese ganado nunca". "Ganar un Dakar sin un buen copiloto es imposible. Su labor es fundamental, te puede hacer ganar o perder un campeonato", explicó el madrileño.
Durante el homenaje Sainz dio una vuelta en coche por las calles de Madrid al alcalde de la ciudad, Alberto Ruiz Gallardón, del que dijo que "es muy valiente por subirse" al Touareg. EFE