Palma de Mallorca (España).- Un juez decretó hoy prisión provisional eludible mediante el pago de una fianza de 3 millones de euros (unos 4 millones de dólares) para el ex ministro español Jaume Matas por doce delitos de corrupción.
En el auto de medidas cautelares dictado hoy, el juez del llamado caso "Palma Arena", José Castro, también prohibió a Matas abandonar el país, por lo que no puede volver a su trabajo en EEUU, y le retiró definitivamente el pasaporte por el riesgo de fuga ante los delitos que se le imputan, penados con hasta 64 años de cárcel.
La fianza fijada para que Matas -principal imputado del caso- pueda eludir la prisión iguala la más alta impuesta en España en la última década en casos de corrupción vinculados con la política.
El juez acusa a Matas, ex titular de Medio Ambiente en el Gobierno del ex jefe del Ejecutivo José María Aznar y ex presidente de la turística región autónoma de las Islas Baleares (este español), de siete delitos de malversación de caudales públicos.
El magistrado también le imputa un delito de falsedad en documento oficial, otro de prevaricación administrativa, uno de fraude a la Administración, uno de blanqueo de capitales y un delito electoral.
En el auto, el juez indica que, "dada la gravedad de los hechos", Matas "bien puede darse por satisfecho" de que las acusaciones "no hayan pedido una medida cautelar más severa", como la prisión incondicional.
Además, Castro considera los tres millones de euros de fianza adecuados a "la naturaleza de los delitos, las circunstancias concurrentes y la economía del encausado".
El juez dio de plazo hasta la medianoche del 7 de abril para que Matas (antiguo líder del opositor Partido Popular, PP, en Baleares) deposite su fianza personal y, de no hacerlo, ingresará en prisión.
El cuñado del ex presidente Fernando Areal, ex gerente del PP balear y quien también tiene retirado el pasaporte y prohibido salir de España, está acusado de tres delitos: dos de blanqueo y un delito electoral, que conllevan una pena máxima de 15 años de cárcel.
Los cargos que se le imputan a Matas, que tiene 54 años y abandonó la política en 2007, están relacionados con el sobrecoste de la construcción de un velódromo en Palma de Mallorca y con el aumento de su patrimonio personal.
En el auto, Castro indica que no se puede explicar el incremento del patrimonio de Matas -que pidió este lunes la baja temporal en el PP tras 17 años en la formación- durante la anterior legislatura.
"Resulta imposible que con los ingresos declarados por la familia Matas-Areal pueda acumularse tal patrimonio y más imposible aún si se hacen compatibles tales adquisiciones con un tren de vida de absoluto derroche y ostentación", indica el juez.
El juez cree que, si bien "cabía esperar" que Matas ofreciera explicaciones que pudieran "desvirtuar los abrumadores elementos de cargo que pesaban sobre él", finalmente su larga y reciente declaración de quince horas resultó tener un "escueto" contenido.
Es más, considera que algunas de las explicaciones del ex ministro suponen una "burla" a su juzgado y los ciudadanos y, en otros casos, "todo un disparate".
"Es claro que el señor Matas ha venido a burlarse de los simples mortales", destaca el magistrado en el auto.
Sobre la construcción del velódromo "Palma Arena" en la anterior legislatura, que costó más del doble de lo presupuestado, hasta 110 millones de euros (148,5 millones de dólares), Castro dice que, lejos de creer a Matas cuando dijo que él no controlaba su gestión, "no cabe imaginar" que las "irregularidades" tuvieran lugar "sin su mandato en algunos casos y su consentimiento o tolerancia en otros".
Matas fue presidente balear en dos legislaturas (1996-1999 y 2003-2007), y ministro de Medio Ambiente entre 2000 y 2003 durante el segundo mandato del dirigente conservador José María Aznar. EFE