Este 3 de mayo se conmemora una fecha que atañe no sólo a quienes ejercemos el oficio de la comunicación social: el Día Mundial de la Libertad de Prensa, efeméride que se deriva de una decisión de la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1993, luego de dos años de una recomendación de la Conferencia General de la UNESCO.
Según Wikipedia “La libertad de expresión es un derecho fundamental o un derecho humano, señalado en el artículo 19º de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948, y las constituciones de los sistemas democráticos, también lo señalan”.
Por su parte, Naciones Unidas propone este día como “…una oportunidad para celebrar los principios fundamentales de la libertad de prensa; para evaluar la libertad de prensa, para defender los medios de comunicación de los atentados contra la independencia y rendir homenaje a los periodistas que han perdido sus vidas en el cumplimiento de su deber".
En la República Dominicana se reitera la necesidad de “una prensa libre, pluralista e independiente”, como componente esencial de toda sociedad democrática y se amplía dicho contenido en el sentido de una libertad en las investigaciones de cada profesional del medio, a fin de obtener los datos que le permitan ampliar lo que sea de interés público, sin restricción alguna.
Háblese de libertades verdaderas, donde no se le niegue al comunicador aquellos documentos que coadyuven a desentrañar verdades. Llámese también a la imposibilidad de que un senador, aparado en sus “poderes”, amenace a comunicadoras y emplee métodos intimidatorios.
Como ocurre con la violencia intrafamiliar y el derecho de las mujeres en el país de poseer una vida digna, sin ataques físicos ni morales, en el último decenio se han multiplicado las denuncias y quejas por esta causa y también en el ejercicio del periodismo han tenido lugar actuaciones y acciones que limitan sin pudor la libertad de prensa .
Se han conocido, además, inverosímiles actos de sometimientos judiciales y amenazas individuales a periodistas y medios para imponer el miedo o el silencio.
Sirva este día y cada uno de los que le siguen, para hacer cumplir el Artículo 19 de la "Declaración Universal de los Derechos Humanos", donde se expresa claramente que: "Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y de recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión."
Seamos pues, libres. Ejerzamos verdaderamente la democracia.
