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Falsos inspectores abandonan haitianos en finca

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Santiago.- La Policía y el Ejército rescataron este jueves 20 niños con edades entre uno y 13 años y a tres mujeres, abandonados en una finca de Guayacanes Adentro, provincia Valverde, por tres hombres que se identificaron como inspectores de Migración.

Las autoridades de Migración en la zona norte dijeron que los menores, al ser rescatados, fueron entregados al Consejo Nacional de la Niñez (CONANI), en la ciudad de Santiago.

Las dos niñas más grandes del grupo de 11 y 13 años, las únicas que hablaban español, dijeron que hace menos de 15 días sus padres se las entregaron a haitianos que se dedican al tráfico de personas, para que las transportaran a la ciudad de Santiago desde Puerto Príncipe.

Las menores, que se identificaron como Rosa María Pié y Naty Pié, explicaron que como no tienen familiares en el país, se dedican a pedir en las calles y que tres hombres las recogieron y las montaron en una guagua y que decidieron trasladarlas a la frontera para su posterior repatriación, pero que luego las dejaron abandonadas en una finca.

Una de las niñas dijo que su deseo es vivir en su país junto a sus padres, pero que supuestamente no las quieren.

Según organizaciones dominicanas y haitianos, después del terremoto del 12 de enero que afectó a Haití, muchos haitianos se están dedicando a entregar sus hijos a traficantes de humanos para que los transporten a República Dominicana, porque piensan que en este país tienen mejor futuro y mayores posibilidades de subsistencia.

Las adolescentes explicaron que los desconocidos que se hicieron pasar como inspectores de Migración, las obligaron a abordar la guagua y que luego las abandonaron.

Tres horas más tarde, los veinte menores y las tres mujeres fueron localizados por vecinos del lugar, quienes dieron parte a las autoridades.

Los niños más pequeños se cabeceaban durmiéndose unos encima de otros, llenos de lodo y las caras sucias”, dijeron algunos lugareños.

Maibel Pie, Katherin Omery y Dianda Omery, las únicas tres mayores de edad, no sabían hablar en español, por lo que solo se dedicaban a amamantar a los dos niños 8 y 11 meses de nacidos y hacían señales que eran traducidas por una de las jóvenes haitianas que se desenvolvía muy bien con el idioma español.

Al ser rescatados por miembros de la Policía y el Ejército, fueron conducidos a la Fortaleza General Benito Monción en Mao, sede de la Cuarta Brigada de Infantería del Ejército, donde posteriormente fueron entregados a Migración.

Las autoridades migratorias en la región norte dijeron que el caso se está investigando, aunque aclararon que esas personas no trabajan en ese organismo.

Un responsable de Migración dijo que los menores que son traficados desde Haití se exponen a todo tipo de abuso de parte de las personas que los traen desde su país y por desaprensivos.

Mientras el presidente de la Comisión de los Derechos Humanos en Santiago, Dionisio Jérez, dijo que el país se expone a serias sanciones de parte de organismos internacionales por permitir el tráfico de niños y niñas desde Haití.

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