Cuando al ex gobernador del Distrito Federal y actual Ministro de Educación de Brasil, Cristovão Chico Buarque, un estadounidense en las Naciones Unidas le preguntó lo qué pensaba acerca de la internacionalización de la Amazonia, pero que su respuesta fuera la de un humanista y no de un brasileño, el interpelado respondió sin dilación que si este pulmón del gran coloso suramericano debiera ser internacionalizado, pues sería factible entonces, internacionalizar también las reservas de petróleo del mundo entero.
Y fue tan profunda la respuesta de Cristovão Chico Buarque, que aún por las redes sociales de Internet circulan sus sabias palabras al reafirmar: “como humanista, sintiendo el riesgo de la degradación ambiental que sufre la Amazonia, puedo imaginar su internacionalización, como también de todo lo demás, que es de suma importancia para la humanidad”.
Desde hace mucho tiempo, la Amazonia, reserva de oxígeno todos los seres humanos en el planeta, está siendo amenazada por quienes aspiran a convertir al mundo en un sitio inhabitable y pleno de impurezas.
Inteligente fue la respuesta del ministro cuando defendió que nunca debían ser manipulados y destruidos por el sólo placer de un propietario o de un país, los patrimonios culturales y patrimonio natural amazónico.
“Si EEUU quiere internacionalizar la Amazonia, para no correr el riesgo de dejarla en manos de los brasileños, internacionalicemos todos los arsenales nucleares. Basta pensar que ellos ya demostraron que son capaces de usar esas armas, provocando una destrucción miles de veces mayor que las lamentables quemas realizadas en los bosques de Brasil”. Concluyó el gran humanista.
