PRETORIA.- Un gol del japonés Keisuke Honda acalló a los leones indomables de Camerún en el primer encuentro de ambos en el Mundial de Sudáfrica y marcó con un 1-0 la primera victoria de los nipones en esta competición lejos de su territorio, lograda en el césped del Free State de Bloemfontein.
La victoria marcará un hito para la selección asiática, dirigida por el local Takeshi Okada, el primer técnico que logró llevar a los nipones a una fase final mundialista en 1998. En tanto, Camerún sufrió su primera caída en un debut mundialista.
Para el Camerún de Samuel Eto’o supone un severo contratiempo para lograr en su continente la clasificación para los octavos de final en un grupo en el que Holanda aparece como el serio dominador, tras haber derrotado con autoridad a Dinamarca por 2-0.
Los ‘Leones’ mostraron que están en franca decadencia y que el liderazgo del atacante del Inter de Milán no es suficiente para reactivar al equipo.
El tanto de Honda llegó gracias a un centro aéreo, precisamente la fase del juego en la que menos fuertes son los japoneses; pero el jugador del CSKA de Moscú se encontró con el centro de su compañero Matsui, el mejor del equipo, en los pies, con tiempo suficiente incluso para colocárselo y batir a Souleymanou.
Fue en las postrimerías del primer tiempo y cuando Camerún había logrado revertir el dominio japonés, hasta ese momento muy presente en todas las fases del juego.
Los nipones, mejor asentados en el campo, lograron hacerse con el control del centro del campo y atajar con virtud táctica la superioridad técnica que se les suponía a sus rivales.
Una apuesta que dio resultados puesto que los leones apenas pudieron desplegar el juego ofensivo que había previsto Paul Le Guen, muy centrado en penetrar por las bandas, un objetivo que se estrelló con la buena disposición nipona.
Poco a poco los africanos fueron ocupando el terreno, pero el dominio territorial tuvo el efecto contrario al perseguido, porque en un ataque japonés llegó el tanto a los 39 minutos, cuando mejor estaba jugando Camerún.
Tras el descanso, los leones adelantaron líneas pero apenas lograron revertir el dominio táctico japonés. Sólo Eto’o en una brillante jugada en el minuto 50 hizo temblar a la zaga nipona, con una internada por la banda que dejó en la estacada a tres defensores para centrar a Choupo Moting, que envió el balón alto.
La buena intención africana se estrelló, una y otra vez, contra el muro Nipón. El adelanto de líneas proporcionó a Japón una ocasión de agrandar el marcador en el minuto 82.
Un disparo de Hasebe rechazado por el portero camerunés permitió a Okazaki recoger el rechace y estrellarlo en el exterior del palo africano.
El miedo no achicó a los leones, que siguieron buscando el empate. Lo tuvo en sus botas Webo en el tiempo de descuento, cuando remató un buen centro desde la derecha de Geremi; una buena estirada de Kawashima evitó el tanto a escasos centímetros de la raya de gol.
Esa jugada mantuvo a buen recaudo la victoria nipona, festejada por todo lo alto por los africanos.
Este encuentro de la primera fase del Mundial de Sudáfrica se disputó en el Estadio Free State, de Bloemfontein, ante 43.000 espectadores.