Shanghái (China).- La fiesta nacional peruana del 28 de julio llegó hasta China con la celebración hoy del Día de Perú en la Exposición Universal de Shanghái, en la que no faltaron danzas y música tradicionales que hicieron bailar al público.
Perú llevó a la Expo sus mejores tonderos, marineras limeñas y huaylash para animar su día en la Expo, que comenzó con el himno nacional, interpretado por una banda militar china, y el izado de la bandera peruana, que ondeó durante todo el día junto a la de la Oficina Internacional de Exposiciones (BIE) y la de China.
El embajador de Perú en el gigante asiático, Harold Forsyth, presidió los actos institucionales del día ataviado con las ropas de los chalanes de la costa norte de su país, y estuvo acompañado por el subcomisario general de la Expo Ju Yijie, que en el pasado ejerció de diplomático en el país andino durante varios años.
El sabor peruano lo puso el grupo de folclore "Así es mi tierra", radicado en Tokio, que actuó ante las autoridades y el público chino con ritmos de la costa y la sierra de su país.
La música tradicional y los coloridos trajes típicos fueron metiendo poco a poco al público chino en el espectáculo.
Casi al final, los integrantes del grupo se saltaron el protocolo y las estrictas medidas de orden del acto e invitaron a las autoridades y al público general a bailar con ellos.
Las autoridades declinaron la oferta, pero una veintena de espontáneos subieron al escenario con los artistas para bailar el huaylash final.
"Fabuloso, se portaron magnífico", aseguró a Efe sobre el público chino el director de la compañía, Carlos Galarzza, quien añadió que, aunque "hay mucha diferencia" con Perú, "vimos que respondieron de muy buena manera".
La coreógrafa de la compañía, Harue Nakamine, de ascendencia japonesa, señaló que los bailes mostrados en la Expo de Shanghái "representan, de cada región, cada costumbre" y que la coreografía está pensada para que "la gente cuando lo vea, vibre como nosotros y se sienta parte de nuestra tierra".
El embajador Forsyth, máxima autoridad peruana presente en el evento, destacó la "feliz coincidencia" entre la fiesta nacional y el Día de Perú en la Expo, aunque eso impidió la presencia de un miembro del Gobierno en los actos oficiales, como es costumbre en la celebración de todos los días nacionales en la Expo.
El pabellón peruano, de 1.000 metros cuadrados y alquilado a los organizadores del evento, ya ha recibido unos dos millones de visitantes, con una media de 25.000 diarios, según datos de sus responsables, en la que espera ser la Expo más visitada de la historia.
Forsyth señaló que el número de visitantes al espacio peruano ha superado sus expectativas y atribuyó el éxito de público a "la fortaleza de la cultura peruana y a la presencia también de la gastronomía peruana".
El pabellón cuenta con una gran "huaca", un templo ceremonial precolombino, que ocupa casi todo el espacio, rodeada por pantallas en las que se muestran imágenes de Perú y custodiada en las cuatro esquinas del pabellón por obras artísticas que quieren evocar parte de la cultura peruana.
Tras recorrer la "huaca", el visitante puede degustar platos típicos en el restaurante del pabellón y recorrer sus tiendas de recuerdos.
El embajador aprovechó el Día de Perú en la Expo para presentar a la prensa china el libro "Historia, anécdotas y algunas recetas de la cocina peruana", el primero sobre gastronomía del país andino que se publica en chino y que incluye siete recetas.
El libro, escrito por Berit Knudsen y presentado en tres idiomas, con traducciones en español e inglés, arranca con una breve historia de la cocina peruana, para presentar a continuación el pisco y también el cebiche, incluida la polémica sobre cómo debe escribirse su nombre.
La patata tiene un lugar privilegiado en el volumen, donde se explica el origen milenario de su cultivo y su historia, además de presentar algunas recetas para ella.
La obra tiene una tirada de 5.000 ejemplares, aunque el público general del gigante asiático no lo podrá comprar, ya que sólo está destinado a especialistas en hostelería y en gastronomía, periodistas especializados en el sector y empresarios interesados en abrir restaurantes, explicó Forsyth. EFE