Santiago.- Un incendio que se originó cerca de la media noche del sábado redujo a cenizas siete viviendas y dos talleres de ebanisterías en el sector los Salados Nuevos, al norte de Santiago y los pocos enseres que quedaron en algunas de las casas siniestradas desaprensivos cargaron con ellos, denunciaron los afectados.
Con este fuego suman a ocho los que se han originado en Santiago en menos de 12 días dejando al menos un saldo de un bombero muerto, 13 lesionados, viviendas, establecimientos comerciales y vehículos afectados y pérdidas materiales por encima de los mil millones de pesos.
Guillermo Rodríguez uno de los afectados, dijo que el fuego comenzó en una casa, cuyo propietario no se encontraba presente.
Se quejó porque algunas de las personas lograron salvar televisores, lavadoras, cilindros de gas, estufas y otros utensilios, pero que en medio de la confusión reinante y la oscuridad, desconocidos aprovecharon y cargaron con ellos.
El propietario de uno de los talleres siniestros identificado como Ulises Cubano, dijo que el incendio afectó maquinarias y madera dejando pérdidas en más de dos millones de pesos.
Claribel Holguin y Carmen Matías, dos de las afectadas, lamentaron que personas desaprensivas en vez de ayudarlas lo que hicieron fue robar los pocos enseres que pudieron salvar.
Matías significó que los pillos le llevaron un televisor, un colchón y una estufa que con la ayuda de otros vecinos logró salvar y que todavía debe a la tienda de electrodomésticos.
"Las personas que hicieron eso no tienen perdón de Dios, no creo que entre al reino de los cielos alguién que se aproveche de una situación como ésta para robar lo poco que nos ha quedado, eso es un pecado imperdonable•", dijo Matías.
“Eso cojió fuego y nosotros estábamos tratando de sacar algo, pero lo que estábamos sacando, se lo llevaba la gente” dijo de su lado, Claribel Holguin.
Holguín explicó que gracias a la intervención rápida de los bomberos no resultaron más viviendas del entorno afectadas.
Dijo que en una sola casa residían hasta dos familias, ya que las viviedas fueron divididas a la mitad.
Los vecinos dijeron que tan pronto llamaron a los bomberos se apareció una unidad al mando del coronel Alexis Moscat, jefe del organismo y que luego se integraron otras y lograron controlar el siniestro y evitar que se propagara a otras contiguas.
Técnicos de los Bomberos y la Policía Científica investigan el origen del fuego.