Pekín.- El Templo del Caballo Blanco de la ciudad de Luoyang (centro), el más antiguo de China, aumentará su superficie por seis y sufrirá una gran remodelación con el objetivo de convertirse en uno de los centros más importantes del budismo mundial, informó hoy el diario estatal "China Daily".
La expansión del recinto actual, de 13,3 hectáreas, incluye la construcción de jardines y edificios inspirados en otros países con importantes comunidades budistas, tales como India, Sri Lanka, Japón, Corea o Nepal, destacó la información.
Un jardín que homenajea a la India ya ha sido construido con ayuda de ese país vecino, que aportó 4 millones de dólares, y esta nueva área del templo fue visitada a finales de mayo por la presidenta india, Pratibha Patil.
El Templo del Caballo Blanco (Baima Si) fue construido en el año 62 por el emperador Ming Di, de la dinastía Han, para honrar la memoria de dos monjes indios, y fue el primer templo del budismo, creencia que llegó a través de la Ruta de la Seda y más tarde una de las religiones más extendidas en la civilización asiática.
Fue en este templo donde los sutras (escritos sagrados del budismo) fueron traducidos al chino, lo que ayudó a la extensión de esta religión en el país.
Tras los años difíciles del maoísmo y la Revolución Cultural, en los que el budismo fue perseguido por ser considerado una creencia supersticiosa, esta religión está viviendo un auténtico "revival" en el gigante asiático, con la construcción de nuevos templos y monasterios o la remodelación de los antiguos, no sólo con fines espirituales sino también para aumentar el turismo. EFE